El Papa Francisco recibió ayer en Roma a una delegación de familiares de las víctimas del atentado a la Amia, que se llevó el compromiso de acompañamiento "en la búsqueda de verdad y justicia", y anunció que propondrá al sumo pontífice para el premio Nobel de la paz por promover el diálogo interreligioso.
El encuentro se extendió por una hora y media en la residencia de Santa Marta, y allí los familiares encontraron en el Papa "la universalización del pedido de verdad y justicia en un marco de diálogo y comprensión para tener paz", informó Sergio Burstein, referente de la agrupación 18J, de familiares de víctimas del ataque.
El dirigente también afirmó que propondrán a Francisco como candidato al Nobel de la paz, y agregó: "En una caricia para el alma; el Papa recibió a judíos y no judíos para abrazarnos, marcando una diferencia con nuestra comunidad, que nos da la espalda por pensar de una manera diferente y decir la verdad".
Al escuchar la propuesta del grupo de promoverlo para el Nobel sobre la base de ser un gran promotor del diálogo interreligioso, Francisco dijo que nunca acepta títulos honoris causa ni otras distinciones, pero que tratándose de familiares de víctimas del atentado de la Amia, no podía oponerse a la propuesta, según reflejó la agencia internacional AFP.
En tanto, en declaraciones a la prensa tras la audiencia —reproducidas por la Agencia Judía de Noticias (AJN)—, Burstein subrayó que el ex arzobispo de Buenos Aires "es una persona maravillosa", y agregó: "Nos dijo que podemos contar con él y, como contrapartida, nos comprometimos a trabajar en conjunto y le anunciamos que vamos a iniciar una campaña para proponerlo como premio Nobel de la paz por lo que él lleva adelante".
"Cada uno contó su experiencia y todos nos emocionamos cuando Rosa Barreiros le entregó una foto y el último guardapolvos que tenía de Sebastián", sostuvo el dirigente respecto a ese niño de cinco años que fue una de las 85 personas asesinadas en el ataque terrorista perpetrado en Buenos Aires el 18 de julio de 1994.
Además de Burstein y Barreiro, participaron Olga Degtiar, Graciela Linial de Furman y Daniel Komarovsky, quienes estuvieron acompañados por sus abogados en derechos humanos e internacionales Alicia Oliveira y Eduardo Valdes.