La clave para arrestar a tres jóvenes por el asalto a un local de telefonía
celular en el centro de la ciudad de San Lorenzo la dio un testigo que aportó el número de la
patente del auto en el que se movían los ladrones. Pero también ayudó la inexperiencia puesta de
manifiesto por el trío. Es que el vehículo en que se movía la gavilla es propiedad de uno de los
asaltantes, está registrado a su nombre y con el domicilio en el cual se fue a esconder después del
golpe, en el barrio Tablada. Por eso, los pesquisas de la Unidad Regional XVII tardaron pocas horas
en dar con el sospechoso y secuetrarle un revólver 22 y al menos siete teléfonos móviles
recientemente robados.
De allí en adelante, la investigación siguió en otro domicilio de la zona sur de
Rosario y se extendió a una vivienda de Puerto General San Martín. En esos procedimientos fueron
detenidos otros dos sospechosos y se incautaron 38 de los teléfonos robados. Ninguno de los tres
acusados, que tienen 19, 22 y 26 años, posee antecedentes penales registrados y eso develó su
amateurismo. "Al parecer son primarios en el delito y cometieron el error de usar su propio auto
para cometer el hecho", describió una fuente policial.
A punta de pistola. El asalto por el que fueron detenidos los sospechosos
ocurrió a las 13 del martes en Artigas 630, a media cuadra de la plaza San Martín de la "Ciudad
histórica". Se trata de un local dedicado a la venta de telefonía móvil denominado IDG
Comunicaciones. A esa hora se encontraba la dueña y un empleado, quienes estaban a punto de cerrar.
Según fuentes policiales, cuando ya no quedaban clientes ingresó un hombre joven que portaba un
arma de fuego y que controló la situación de inmediato.
Las víctimas fueron dominadas y llevadas a punta de pistola hacia una habitación
trasera que funciona como depósito. Allí el ladrón les ató las manos y los hizo tirar al piso boca
abajo, desde donde escucharon que un cómplice irrumpía en el local. Así, y durante varios minutos,
los asaltantes comenzaron a revolver cada rincón del comercio y a recolectar todos los aparatos que
podían en un bolso.
Cuando los autores del atraco iniciaron la retirada, la comerciante logró zafar
de las ataduras y salió a la calle para increparlos. A esa altura del acontecimiento, los dos
hampones caminaban, bolso en mano, tranquilamente por calle Artigas en dirección al oeste.
Tiro al aire. Fuentes de la Unidad Regional XVII indicaron que como la víctima
siguió gritando e intentó correrlos, uno de los asaltantes efectuó un disparo que afortunadamente
no llegó a lastimar a nadie.
En tanto, testigos del episodio contaron que el dúo corrió hacia calle General
López y al girar subió a un utilitario Peugeot Partner de color verde o azul. Los testimonios
recolectados por la Brigada de Investigaciones de la URXVII revelaron la patente de ese auto y así
supieron que el mismo estaba registrado en Rosario. "En el relevamiento de datos, un vecino aportó
un número de patente. Ese dominio fue ingresado a la base de datos del Registro Nacional de la
Propiedad Automotor y así establecimos que se trataba de un coche radicado en Rosario", describió
un vocero.
Casa por casa. Con esa información, un grupo de policías al mando del comisario
Sergio Di Franco se presentó en el domicilio donde vive el titular de la Partner, en Chacabuco al
3600 de barrio Tablada. Los agentes esperaron durante unos minutos hasta que, para su propia
sorpresa, apareció el vehículo con un solo ocupante.
Cuando requisaron el auto, los policías descubrieron debajo de la alfombra del
asiento del conductor siete teléfonos móviles y un revólver calibre 22. Por eso su titular, Emanuel
A. G. , de 19 años, quedó detenido.
A partir de ese momento, con información surgida en el mismo barrio, la pesquisa
derivó hacia otro procedimiento en una vivienda de 1º de Mayo al 4300, donde se secuestraron varios
celulares y fue detenido Facundo G. S., de 22 años. Y, en el marco de la pesquisa, horas más tarde
se hizo un tercer allanamiento en la ciudad de Puerto San Martín. Allí, en una vivienda de Iguazú
al 1800, se detuvo a Mauro N. G. de 26 años. En los tres lugares se secuestraron en total 38
celulares, todos robados en el negocio de Artigas al 800. En cuanto a los detenidos, ayer
trascendió que los dos primeros son rosarinos, mientras que el otro es oriundo de Morón, provincia
de Buenos Aires.