La audiencia en la que se resolvió la imputación al policía Juan Carlos Belotti, acusado de sustraer de la Sección Balística armas y municiones oportunamente secuestradas como evidencia judicial y canjearlas por una moto, incluyó una escena inesperada, tanto para el acusado como para el resto de los presentes en la sala del Centro de Justicia Penal donde se cumplió ese paso procesal.
En el final de la audiencia que se hizo este martes, Belotti fue notificado sobre los graves cargos penales que debe enfrentar en el futuro juicio y que lo obligarán a una prisión preventiva de dos meses. Se lo tiene como presunto autor de once hechos de peculado en concurso ideal con sustracción de evidencia en concurso real con entrega de armas de fuego.
El singular episodio que sorprendió a todos en la sala de audiencias, incluidos juez y fiscales, fue cuando la madre del acusado, también empleada policial, pidió al magistrado permiso para acercarse a su hijo antes de que fuera trasladado desde el recinto para llevarlo directo al lugar de detención.
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Los elementos secuestrados en la vivienda donde fue detenido este viernes el agente de policía.
El juez aceptó el pedido de la mujer. Pero cuando todos esperaban una escena conmovedora, que hubiera entre ambos un abrazo y se escucharan palabras de contención al hijo, sucedió todo lo contrario. Juan Carlos Belotti recibió un cachetazo y una contundente recriminación de la mujer. “Me defraudaste como madre”, se escuchó.
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Belotti fue detenido el viernes pasado en su casa de Gerchunoff al 600 bis, donde se secuestró su arma reglamentaria, tres cargadores y 200 municiones de diverso calibre. El policía estaba sospechado de haber sido quien sustrajo las armas que debían estar custodiadas en la oficina donde trabajaba y que aparecieron en un allanamiento realizado dos días antes en una casa de Garzón al 900 bis, en Empalme Graneros.
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Según la acusación de los fiscales, el policía entregó todo ese material que formaba parte de evidencia judicial a cambio de una moto.