A menos de dos semanas de ser condenado por un secuestro extorsivo, Ariel Máximo “Guille” Cantero volverá a afrontar un juicio oral y público en los Tribunales Federales de Rosario. Desde el miércoles el líder de Los Monos será acusado como organizador de una banda narco que tiene entre sus acusados a un ex candidato a senador nacional, al conductor de un programa radial ligado a Rosario Central, a un policía que trabajaba en la ex Drogas Peligrosas de la Federal y a un hombre ligado a delitos resonantes que ya cumple una condena unificada a 21 años de prisión.
El caso que se ventilará en el Tribunal Oral Federal 1 se originó en una investigación que detectó una organización que traía marihuana desde Misiones mediante encomiendas postales para luego venderlas en quioscos de las zonas noroeste y centro de Rosario. El líder era Mario “Gringo” Visconti, miembro de la barra brava de Rosario Central de zona norte, ladero de Andrés “Pillín” Bracamonte y con una condena por tráfico de drogas y tenencia para su comercialización. A los pocos meses la causa pareció naufragar cuando a días del asesinato de Julio “Cara de Goma” Navarro, también referente de la barra auriazul y acribillado el 25 de mayo de 2016, varias personas llegaron a la casa de Visconti, se lo llevaron y lo mataron. Su cuerpo apareció el 31 de mayo de ese año con nueve balazos en un camino rural de Ibarlucea.
La actividad de los teléfonos mantuvo viva la pesquisa a pesar de la muerte de Visconti. Pronto se supo que los socios del “Gringo” seguían en el negocio. Entonces la investigación avanzó sobre una red de 18 personas presuntamente implicadas en la red a quienes el juez federal Marcelo Bailaque envió a juicio.
Para los investigadores, el grupo no integraba una organización piramidal con un jefe que comande las acciones de todos, sino una red de individuos vinculados de manera múltiple, sin conocerse entre todos ellos.
Entre los procesados hay un ex aspirante a senador nacional en 2015, Juan Javier Granelli, de 44 años, residente en Casilda y conocido por administrar dos portales de noticias de esa ciudad. Militaba en la línea del peronismo de Adolfo Rodríguez Saa. Es con esta persona que la Fiscalía conectó a “Guille” Cantero. El vínculo, además de evidencia que los pone en contacto directo, es un punto de venta de drogas que manejaba Adriana González, otra de las personas que se sentará en el banquillo.
Entre los procesados de este caso también están Edgardo “Picu” Smolsky, cuyo apellido da título a la carátula de la causa. Smolsky tenía en una radio FM un programa partidario de Rosario Central; y Cristian Negrette, oficial de la División Antidrogas Rosario de la Policía Federal que vivía con Smolsky en Urquiza al 1300, en pleno centro de Rosario. Lo acusan de vender estupefacientes desde ese domicilio y en modalidad delivery, sobre todo en el centro, y por facilitar información policial para ayudar a Smolsky y a otros a eludir las investigaciones. Ambos responderán ante la Justicia por recibir la droga, entregarla a subdistribuidores, venderla ellos mismos al menudeo y brindar datos policiales para evitar la persecución del grupo.
A Granelli le imputarán ser articulador de un grupo con otros tres imputados: Adriana González, Franco Bermúdez y Angel Fleitas. Para los acusadores el ex candidato a senador recibía droga de Bermúdez y la distribuía a los otros para vender al menudeo.
A través de Adriana González, Granelli se vinculó a un hampón muy conocido: Joel David Pucheta, condenado a 6 años y 11 meses de prisión en un juicio abreviado por liderar una banda de robos a casas, con lo que totaliza 21 años de pena por otras condenas que cumple en la cárcel de Piñero. La mujer de Pucheta se llama Jimena Villalva y, según la Fiscalía, para abastecerse de drogas se contactaba con el empresario bailantero santafesino Raúl Narciso “Beto” Basimiani, quien actualmente cumple condena en el penal de Coronda por narcotráfico.
Derivaciones
Este trámite es una derivación de la causa “Los Patrones” donde “Guille” Cantero ya fue condenado a 15 años de prisión. Es por ello que se entablará una batalla jurídica entre sus defensores y la fiscalía. Los primeros alegarán que “Guille” ya fue juzgado por los hechos que se le atribuyen ahora. Para el grupo acusador si bien hay un hilo conductor entre los hechos de los dos juicios los delitos corresponden a distintos momentos. Los que se analizaron en “Los Patrones” fueron desde 2014 hasta fin de 2015. Los que se debatirán son del año 2016.
Lo que no se podrá atribuir a “Guille” son circunstancias que ya se valoraron como la capacidad logística, el despliegue en el terreno y sus conexiones, lo que el fiscal Federico Reynares Solari tendrá en cuenta al solicitar la condena, que para el rol de organizador prevé un mínimo de 12 años.
El juicio que empieza en los Tribunales Federales de bulevar Oroño al 900 se extenderá por más de dos semanas. Los jueces a cargo serán Germán Sutter, Ricardo Vázquez y Otmar Paulucci.
Uno tras otro
Este caso se integra a una secuencia de procesos judiciales donde “Guille” Cantero quedó involucrado. El que tuvo más resonancia fue el que empezó en 2017 en la Justicia provincial y en el que fue condenado a 22 años de prisión por homicidio y jefe de una asociación ilícita, más exactamente la banda de Los Monos. Le siguió una causa como líder de una organización de narcotráfico, en la causa conocida como “Los Patrones”, en la que recibió sentencia a 15 años de prisión. El tercer caso fue el que terminó la semana pasada, en la que fue acusado de planear desde la cárcel un secuestro, por el cual resultó sentenciado a 10 años.
También tiene una condena previa a 2 años de prisión por tenencia ilegal de arma en 2014, y otros dos procesos judiciales pendientes. Uno por las amenazas telefónicas dirigidas hace cuatro años a un juez penal que le había denegado un traslado a la provincia de Santa Fe desde la cárcel federal de Rawson, donde estaba alojado, por el cual un fiscal le pidió 7 años de prisión. Y otro es por la autoría ideológica de siete balaceras a edificios o domicilios de miembros del Poder Judicial.