Miguel Ángel Russo fue homenajeado en el Gigante por las glorias de Central

El Gigante le rindió tributo a un Miguel Ángel Russo desbordado por la emoción. No fue para menos. Cumplió ante Huracán 300 partidos dirigiendo a Central, en la historia solo está por debajo de Don Ángel Tulio Zof y recibió el tributo de una camiseta especial de parte de glorias del club.

En el día de su partido 300 como técnico de Central, los hinchas aplaudieron a rabiar al DT mientras era homenajeado en el césped por jugadores campeones que fueron dirigidos por él: Omar Arnaldo Palma (el primer gol de su ciclo), Horacio Carbonari, Paulo Ferrari (el que más jugó), Ezequiel González y Germán Herrera.

Mientras atrás atronaba el "y ya lo ve, y ya lo ve, es el equipo de Miguel", y el "de la mano de Miguel Russo todos la vuelta vamos a dar".

Miguel Ángel Russo y el Gigante, un combo perfecto

El Gigante de Arroyito, los hinchas canallas y Miguel Angel Russo. Un combo perfecto a lo largo de que historia, pero que este 27 de julio de 2024 tuvo un condimento especial, con un reconocimiento de parte de la gente hacia el entrenador en medio de la distinción que el club le hizo al DT por los 300 partidos como entrenador auriazul.

Quien esperaba emotividad en el Gigante no se equivocó un ápice. Porque el momento, escueto en tiempo, movió las fibras íntimas de todos. De los hinchas que no paran de agradecerle al técnico que transita su quinto ciclo en el club y que siempre estuvo cuando se lo necesitó, y ni hablar del propio Russo, quien se emocionó hasta las lágrimas.

Russo dijo hace algunos días que no estaba al tanto de que iba a cumplir esa cantidad de partidos en Central en este encuentro contra Huracán, pero de inmediato comenzó a imaginar que lo que se venía iba a ser algo especial. Y lo fue.

Los hinchas de Central cantaron por Miguel

Unos minutos antes del inicio del partido el Gigante se convirtió en un hervidero, con los hinchas aplaudiendo a rabiar y vivando a un entrenador al que le tienen un inmenso respeto mientras los campeones canallas le hacían entrega al DT de una plaqueta en reconocimiento a esas 300 batallas que carga sobre el lomo.

Fue una especie de calco a lo que sucedió hace unos poquitos meses, aquel 30 de enero de 2024, en el mismísimo Gigante de Arroyito, en el primer partido de local que el canalla jugó (ante Banfield) después de haberse coronado campeón de la Copa de la Liga en la final ante Platense.

¿Qué es Russo en Central? Es mucho más que el técnico que logró sacarlo campeón en 2023. Es un entrenador que desde que puso por primera vez un pie en Arroyito generó una simbiosis especial con el mundo Central, en especial después de aquel recordado clásico que se dio por terminado antes del tiempo reglamentario.

Russo es el técnico que fue y vino en muchas ocasiones, pero que cada vez que retornó fue para parapetarse frente a alguna situación compleja. A días de haber sido campeón de América con Boca volvió para intentar dejar a Central en primera. Lo hizo en la promoción contra Belgrano. Es el técnico que volvió cuando el canalla se aprestaba a transitar el tercer año consecutivo en la Primera B Nacional y que devolvió al equipo a la elite del fútbol argentino. Es el técnico que estuvo a nada de darse el gusto de sacarlo campeón mucho antes, en aquella final perdida por penales contra Huracán por Copa Argentina. Es el técnico que a lo largo de su historia en Central forjó números implacables en los clásicos, difíciles de explicar desde la lógica más absoluta. Y, claro, es el técnico que arrancó su quinto ciclo en el club para un proceso nuevo, con ciertas obligaciones, pero sin tantas urgencias, y que después de trabajar, equivocarse y acertar, logró lo que siempre buscó: un título. Pero Russo no es sólo ese título de la Copa de la Liga del año pasado, sino que es mucho más que eso.

Miguel pisó el césped como tantísimas otras veces, pero antes de dirigir su partido número 300 recibió el reconocimiento de parte del club y el cariño de los hinchas, en una celebración a la que pudo faltarle cualquier cosa menos emotividad.

El Gigante de Arroyito, los hinchas de Central y Miguel Angel Russo, más que nunca, un combo perfecto.