Newell’s nuevamente se verá obligado a cambiar la formación titular. Para el partido con Godoy Cruz debió reemplazar a tres futbolistas por lesión y el sábado contra Vélez en Liniers serán dos, ambos por suspensión: Pablo Pérez, que llegó a la quinta amarilla, y Guillermo Balzi, que resultó expulsado. Por características y preferencias del entrenador, los candidatos a ingresar son el juvenil Marcos Portillo y Cristian Ferreira.
El problema en el armado del equipo se sucede fecha tras fechas aunque ninguna de las bajas seguramente se lamenta tanto como la de Pérez, uno de los pocos talentosos del plantel y autor de un golazo frente a Godoy Cruz. En este encuentro le sacaron la tarjeta amarilla y sumó cinco amonestaciones, por lo que deberá cumplir una fecha de suspensión.
Lo único positivo es que el volante no tendrá ninguna exigencia y así se preservará para el partido de cuatro días después por Copa Argentina frente a Talleres.
El otro inconveniente con el que se encuentra el entrenador es la roja a Balzi. El juvenil estaba poco a poco levantando su nivel y la dura infracción que le cometió a Andrada lo deja afuera del equipo.
Sanguinetti se quedó sin ambos para la visita al estadio José Amalfitani, sumado a que no contará con los lesionados Armando Méndez, Ramiro Sordo (a lo mejor reaparece contra Talleres por la Copa Argentina), Gustavo Velázquez, Ramiro Macagno, Leonel Vangioni y Fabián Ángel.
Si se tienen en cuenta las cualidades de Pérez y Balzi, lo lógico es la entrada de Portillo y Ferreira, elegidos por Sanguinetti para ingresar en el segundo tiempo del partido frente al tomba.
Portillo puede ocupar el lugar de Pérez, con mayor dinámica que el experimentado mediocampista aunque menor talento y visión de juego. El juvenil no desentonó en la caída ante el tomba, mostrando actitud y decisión para ir hacia adelante con pelota dominada. De alguna forma se ganó el derecho a ser designado.
Menos mérito hizo Ferreira. Jugó un rato ante el tomba y no consiguió hacerse cargo de la generación. No estuvo fino en el traslado. Pero tampoco es para condenarlo. Por cualidades, es un clásico diez y el indicado para reemplazar a Balzi.
Si bien existe la necesidad de sumar puntos en la Liga Profesional, la proximidad del encuentro por la Copa Argentina quizás lleve al entrenador a preservar a algunos futbolistas frente a Vélez, aunque tampoco tiene demasiado recambio como para estar especulando con los once que jugarán en Liniers.