Remiseros y taxistas casildenses protagonizaron a media mañana de este viernes una ruidosa movilización en reclamo de seguridad tras una seguidilla de robos que sufrieron trabajadores y trabajadoras del sector en los últimos diez días.
Por Gustavo Orellano
Remiseros y taxistas casildenses protagonizaron a media mañana de este viernes una ruidosa movilización en reclamo de seguridad tras una seguidilla de robos que sufrieron trabajadores y trabajadoras del sector en los últimos diez días.
La protesta fue visibilizada a través de una nutrida caravana de vehículos que hizo sonar sus bocinas durante la recorrida por distintas calles de la ciudad y que culminó frente a las puertas del municipio.
Allí los manifestantes fueron escuchados por el intendente, Andrés Golosetti, quien luego de la movida mantuvo una reunión con representantes de empresas de remis y de la cooperativa de taxis donde se abordó la problemática en procura de soluciones.
Del encuentro también participó el jefe de la Unidad Regional IV de Policía del Departamento Caseros, Hernán Ferrero, quien también había manifestado el comprometido de tomar cartas en el asunto y atender la demanda después de la marcha a fin de trazar estrategias para poner freno a la inseguridad.
Así se lo había expresado cuando salió a recibir a los tacheros que pararon frente al edificio policial casildense para luego seguir hacia la sede de Fiscalía y posteriormente culminar la protesta en la Municipalidad.
En la mesa de diálogo que se concretó cerca del mediodía se barajaron una serie de alternativas en materia de prevención del delito que podrían ser instrumentadas en breve, aunque no surgieron mayores detalles.
Al respecto, el mandatario casildense indicó a La Capital que “el municipio se comprometió en evaluar la posibilidad de contribuir con la implementación de botones antipánico, lo que nos parece una herramienta valiosa y la mejor forma en la que podemos aportar para intentar resolver una problemática que muchas veces excede nuestras facultades y posibilidades”.
Asimismo, resaltó que “además la policía articulará con los propietarios de agencias de remises y taxistas estrategias que por obvias razones no podemos dar a conocer públicamente”.
En solo diez días, cuatro remiseros de la agencia Ovidio Lagos fueron víctimas de robos. El último ocurrió este jueves cuando una remisera fue asaltada a punto de pistola por un grupo de delincuentes que le sustrajeron la recaudación y hasta el dinero que llevaba consigo para pagar el alquiler de su vivienda. Tras la traumática experiencia, la mujer sufrió una crisis nerviosa y debió ser asistida por personal del Sies.
Detenciones
Por ese suceso, que potenció el malestar y desembocó en la manifestación de protesta en demanda de seguridad, fueron detenidos en la vía pública dos hombres que quedaron imputados en el marco de una audiencia desarrollada en la primeras horas de esta tarde y donde también se dispuso la prisión preventiva para ambos. El caso es investigado por la fiscal Marianela Luna, quien ordenó una serie de medidas que culminaron con el arresto de los incriminados, a quienes también se le secuestró elementos de interés para la causa en sendos allanamientos llevados adelante en sus domicilios.
“Los hechos delictivos que se sucedieron últimamente hizo que la preocupación aumente al punto que los remiseros ya tienen miedo de tomar pasajeros porque no saben con que se van a encontrar”, dijo a este diario la titular de la agencia local de remis Ovidio Lagos, Betina Miori.
En esa misma línea indicó que “la gran mayoría de los usuarios que utilizan el servicio son gente de trabajo y viven la inseguridad como el resto de la población, pero en algunos casos no conocemos a quienes llevamos y hace que el miedo sea cada vez mayor”
“Esperamos que las autoridades -concluyó- se sienten a trabajar para revertir esta situación porque vemos que avanzan los hechos delictivos y nosotros trabajamos las 24 horas todos los días del año y que te roben el dinero que tanto cuesta ganar hace que uno pierda las ganas y las esperanzas de que esto mejore”.