Hace dos años y medio que María no ve a su hija Luciana, quien en 2019 se fue a vivir a Austria. La joven, de 31 años e ingeniera ambiental, viajó para realizar una maestría en la Universidad de Viena. Fue en épocas previas a la pandemia de Covid-19 y no se imaginaban que no iban a volver a verse por tanto tiempo. Aun cuando ya se permite viajar al exterior, María todavía no pudo salir del país porque está inoculada con la vacuna Sputnik V. En términos generales se conoce que hay países de Europa que aun no permiten el ingreso a personas que recibieron la vacuna rusa, pero asimismo ella confió en los documentos que le dijeron que debía presentar. Su situación refleja la de muchos argentinos que esperan poder visitar el viejo continente.
El domingo María fue a Ezeiza con su pasaje y las documentaciones necesarias para por fin concretar su visita a Austria. En noviembre su hija se graduará y ella pensaba quedarse hasta entonces. Pero no pudo, no le permitieron subir al avión por estar inoculada con la vacuna de Sputnik.
"No es que agarré mi mochila y me fui a Ezeiza así nomás", contó María a La Capital. Ella preparó todos los certificados que desde la empresa de turismo que había contratado le dijeron que serían suficientes para ingresar a Austria. Entre ellos tenía una invitación de la policía migratoria de aquel país y la demostración de que viajaría por visita familiar y no por turismo. "Hice todo, no es que dejé algo suelto, pero no importó nada", relató la mujer.
En la ventanilla de Aerolíneas Argentinas le dijeron que se trataba de un caso especial y que debía hablarlo con la supervisora de la empresa. "Me sentí maltratada", contó María. "La supervisora me dijo que la única forma de entrar era con una autorización del consulado de España (país de llegada del vuelo desde Argentina) con un documento de reunificación familiar", agregó. En ese sentido opinó: "Es hasta ilegal, porque yo para salir firmo una declaración jurada de que todo lo que digo es verdad, y ella me pidió que hiciera algo que no es verdad".
Todo fue desconsuelo una vez que vio que no tenía respuestas y no podría concretar el viaje. "Me fui al bar que está ahí, me tiré en la mesa y lloré como loca. Mi hija me llamó desde Austria y lloramos juntas. Sentí que el Estado no me estaba escuchando", contó María. "Además nadie reconoce los gastos de ir hasta Ezeiza, de los hisopados, del seguro de viaje y todo lo que implica prepararse para viajar", agregó con disgusto.
Un limbo
En días en los que muchos países de Europa ya abrieron sus fronteras al turismo, e incluso no exigen cuarentena o pasaporte europeo, la restricción a personas vacunadas con Sputnik V aparece como un obstáculo sin un horizonte claro. Para algunos casos, como viajes por trabajo o visitas familiares, puede alcanzar con el permiso del consulado del país de destino. Sin embargo, como en el caso de María, hay poca claridad sobre qué aspectos pueden impedir viajar.
Es que los 27 países que integran la Unión Europea diagramaron sus propias reglas de admisión a extranjeros. Pero en términos generales la mayoría solo aceptan a quienes están vacunados con las fórmulas aprobadas por la Agencia Europea de Medicamentos (EMA), es decir Johnson & Johnson, AstraZeneca, Pfizer y Moderna. También están quienes permiten el ingreso de quienes están vacunados con las fórmulas aceptadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que además de las anteriores incluye a Covishield, Sinovac y Sinopharm.
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La Sputnik aún no fue aprobada por ninguno de estos dos organismos y solo algunos pocos países aceptan el ingreso a personas inoculadas con esta fórmula. Quienes pretenden viajar a Europa deberán prepararse según los requisitos particulares solicitados por los países de destino, aunque quienes fueron vacunados con Sputnik V deberán esperar que avance la aprobación de los organismos internacionales.
La Sputnik V espera desde principios de marzo la licencia para ingresar al mercado europeo de forma masiva. Desde el Fondo de Inversión Directa de Rusia estiman que la vacuna recibirá el registro en los próximos dos meses.