El patrimonio que regularmente el Museo de Ciencias Naturales Ángel Gallardo no tiene expuesto al público, que sobrevivió al incendio de julio de 2003 y que se conserva casi como un tesoro en los entrepisos del organismo ya que el fuego consumió el 80 por ciento de las piezas, será una vez más mostrado al público en visitas guiadas cortas y de número reducido de personas en los entrepisos de la sede de San Lorenzo 1949 con reserva previa.
En 2023, a dos décadas del siniestro, el organismo abrió por primera vez al público este espacio del Departamento de Zoología y este año, ante el éxito de aquella convocatoria, volverá a hacerlo para dejar ver las piezas de animales taxidermizados que sobrevivieron a las llamas: desde minúsculos insectos hasta un oso pardo de más de un metro parado en sus dos patas, que hace muchos años recibía a quienes visitaban el viejo museo y que muchos entre el público actual no conocen.
Las citas para acceder a la Colección de Fauna serán este viernes 19 de abril y el próximo 3 de mayo con turnos a las 11, 12, 16 y 17. Si bien los recorridos son con entrada gratuita, por el espacio que debe visitarse, la actividad se lleva adelante con cupos limitados y reserva previa, que debe hacerse vía telefónica al 477-2549 (de martes a viernes, de 9 a 18).
Rescate de una colección
Desde el incendio ocurrido en el año 2003 cuando el museo funcionaba en los altos de la actual Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) los equipos del museo continúan investigando registros bibliográficos, fotográficos y orales que buscan recuperar información referida a las colecciones que superaron las llamas y dotarlas de contenido significativo.
Para los organizadores, estas colecciones "vehiculizan mensajes, representan ideas y simbolizan relaciones entre las personas que los produjeron y los visitantes, quienes les atribuyen valor en función de un contexto estético, histórico, político, social y económico".
Así, tras el fuego de 2003, comenzó un proceso de reconstrucción, reorganización y recuperación de objetos pertenecientes a las diferentes colecciones; se avanzó en el recuento, descripción y limpieza de materiales zoológicos, mineralógicos, paleontológicos, arqueológicos y mobiliarios.
Las prácticas de restauración realizadas durante estos años, permitieron recuperar piezas que hoy se encuentran en exhibición y otras tantas en reserva, que son a las que el público podrá acceder en esta oportunidad y por segundo año consecutivo.
Lo cierto es que esta propuesta las áreas Zoología, Educación y Conservación no sólo dan a conocer parte del patrimonio del museo que habitualmente no está exhibido a los ojos del público, sino que además permiten compartir saberes respecto a especies animales originarias de Santa Fe y de Argentina, además de ejemplares de biodiversidad exótica. Una forma más de tomar conciencia de las acciones que protegen y valoran a las especies autóctonas.