Santiago “Chano” Moreno Charpentier, el ex líder de la exitosa banda musical Tan Biónica, continúa internado a causa de las heridas que le causó un disparo en el abdomen hecho por un policía al que habría querido apuñalar durante un episodio ocurrido en su casa. El cantante se negaba, aparentemente, a ser trasladado a un centro asistencial, en medio de un presunto brote psicótico, según testigos.
La Capital habló con la directora de Salud Mental de la secretaría de Salud Pública de Rosario, la psicóloga Jésica Redondo, y la vicedirectora, la psiquiatra Victoria Mancini, sobre el circuito de atención en la ciudad de personas que consumen una o más sustancias de manera problemática lo que puede exponerlos a distintos riesgos.
El objetivo desde Salud es asesorar, atender e intervenir desde una mirada integral las demandas vinculadas a los consumos, sostenida por una serie de dispositivos en un engranaje intersectorial e interdisciplinario.
Lo primero que aclaran las especialistas es que la salud mental es parte de la salud integral y que según lo establece la Ley Nacional de Salud Mental, vigente desde una década, es necesario terminar con la idea única del encierro y la internación como salida para quienes consumen alcohol y/o sustancias psicoactivas.
También que es imprescindible dejar de ver al usuario como alguien "peligroso" sino que es importante entender que se trata de alguien "en riesgo".
"Durante mucho tiempo, e incluso aún está vigente, hay una mirada que liga directamente al consumo problemático con la delincuencia y la violencia y por eso muchos buscan controlar a esa persona con el encierro, en ocasiones con la participación de la policía para terminar en una cárcel, por ejemplo", dijo Redondo.
Asistencia: lugares y opciones
Los centros de salud (hay más de 50 instalados en cada barrio de la ciudad), y que forman parte de la red de salud municipal, asisten, acompañan y guían a muchas personas que hacen uso, abuso o son adictos a determinadas sustancias.
Existe La Estación, que funciona en Gálvez 867, es un dispositivo que fue especialmente creado y pensado "para recibir a quienes deseen consultar sobre su situación, o la de una persona cercana, en relación al consumo de sustancias", explicaron las profesionales.
Los polivalentes, desde sus guardias generales, están preparados para la recepción y atención de urgencias que incluyen las referidas al consumo, “así como dan respuesta a aquellas intervenciones que el equipo de salud ubique que necesitan un ámbito hospitalario de mayor cuidado, como una internación”, explicaron.
"Una puerta de ingreso al sistema de salud son los centros de salud que están conformados por equipos interdisciplinarios que cuentan con médicos generalistas, psicólogos, trabajadores sociales, enfermeros, farmacéuticos, psiquiatras, que tienen una función matricial, como decimos", señalaron las funcionarias.
"Para las primeras consultas, para las personas que requieren asistencia ambulatoria, para situaciones programadas y un tratamiento, están los centros de salud y cumplen muy bien este trabajo", dijo Redondo, quien reforzó la idea de que "a las problemáticas de consumo hay que enmarcarlas en el ámbito sanitario como sucede con cualquier otro tema de salud".
Crisis y salud mental
Victoria Mancini destacó que “un brote psicótico, un duelo complicado, una descompensación, forman parte de una crisis subjetiva. Es un momento en el que la persona tiene una desestabilización que va a requerir un abordaje que no necesariamente tiene que ser en un hospital o un lugar de internación y muchos menos requerir la presencia de la policía".
Tanto Redondo como Mancini mencionaron que los guardias de los hospitales están capacitadas para tomar a un paciente con una crisis. "El equipo de salud mental da soporte permanente", afirmaron.
Situaciones como la que ocurrió con Chano, "no son de las más frecuentes pero ocurren", mencionó Redondo y agregó: “Incluso tienen diferentes repercusiones de acuerdo dónde ocurran, cuando pasa en un barrio de nuestra ciudad lamentablemente no tiene la misma visibilización y discusión que trajo, por ejemplo, la situación del cantante”.
Por otro lado, señaló la profesional, “las situaciones donde alguien pone en riesgo al entorno son mucho menos frecuentes que aquellas en las que se ponen en riesgo ellos mismos”.
Cómo manejar una crisis
Puede pasar que familiares o vecinos llamen a la policía ante una crisis de una persona porque sienten que no tienen manera de manejar el episodio. "Lo que sugerimos es que se llame al 107, ya sea en una situación que se da en un hogar o en la vía pública", sostienen las profesionales.
"Es muy importante que podamos ver al sujeto como alguien sufriente, que tiene derechos y que puede salir de ese estado. Si logramos abordar esto desde los cuidados comunitarios, si podemos reestablecer los lazos sociales, y no encerrar o excluir a la persona y a su entorno hay opciones de alivio, claro que sí”.
Agregaron que "las internaciones existen pero son recursos excepcionales y de ninguna manera un sujeto que ingresa en una internación tendrá que quedarse en esa situación para siempre: se terminó eso de que alguien ingresa a un espacio psiquiátrico (el antiguo manicomio) para no salir más".
Temores y desconocimiento
Las especialistas aseguraron que "aún hay mucho desconocimiento y temor en la población general, hay miedo a la locura, se teme lo desconocido aunque de a poco va cambiando".
En los centros de salud, aseguraron, "es común que las personas consulten con el psicólogo o el psiquiatra, ya sean adultos o niños o adolescentes en diferentes momentos y por distintas situaciones".
Las respuestas o las mejoras no se ven de un momento para otro, los abordajes de salud mental requieren un proceso "un tiempo con idas y venidas" y no se trata de "demonizar, señalar a quien consume o tratar de alejarlo de un día para el otro de la sustancia: desde el punto de vista del marco sanitario uno intenta minimizar el riesgo, reducir el daño y centrarnos no en el consumo sino siempre en el sujeto", afirmaron.