Ante las nuevas restricciones a la circulación para evitar contagios de Covid-19 que propuso el gobierno nacional, pero dejó a criterio de cada provincia, desde la Intendencia de Rosario aguardan con cautela las definiciones del gobernador Omar Perotti para ajustar medidas y protocolos. Es que Santa Fe deberá contemplar nuevos indicadores sanitarios determinados por la Nación para evaluar cómo y dónde realizará las limitaciones horarias.
En el último reporte público de la Secretaría de Salud de la Municipalidad se desagregan datos que muestran el escenario sanitario actual. Hasta el momento la tasa de letalidad (proporción de fallecimientos en relación a los contagios) es de 2,30 por ciento cada 100 mil habitantes. Además, el 69,9 por ciento de los infectados tuvo contagio comunitario, un 19 por ciento contrajo la enfermedad por contacto estrecho, un 0,4 por ciento es caso importado, y un 3,7 por ciento es trabajador de la salud.
El distrito centro acumuló la mayor cantidad de contagios, seguido por el noroeste, el sur, el sudoeste, el norte y el oeste.
En la semana del 1º de enero al jueves 7 se realizaron 2.166 test en laboratorios municipales por sistema PCR: de ese total, 508 dieron positivo (23 por ciento). Con el sistema de testeos rápidos se hicieron 996 (271 positivos, es decir el 27 por ciento).
En tanto, un parámetro que marca la evolución de la pandemia, es el número de reproducción diario Rt (contagiados secundarios a partir del primario), que da 1,09. El tiempo de duplicación de casos totales es de 145 días.
Cuando ayer al mediodía la secretaria de Acceso a la Salud de la Nación, Carla Vizzotti, adelantó detalles del decreto que regulará el toque de queda sanitario y que se logró consensuar entre el presidente Alberto Fernández, los ministros del área y los gobernadores de las 24 jurisdicciones, expuso varios fundamentos.
Indicó que a partir de los estudios epidemiológicos se pudo establecer que los nuevos contagios se daban mayormente por las actividades nocturnas y por un relajamiento de las medidas de prevención.
Así, dio dos indicadores a tener en cuenta, y que son muy dispares en cada provincia. El primer dato es que el cociente (resultado de dividir) entre el número de casos confirmados acumulados en los últimos 14 días y el número de casos confirmados acumulados en los 14 días previos sea superior a 1,20. Es decir, que los casos aumenten un 20% de una quincena a la otra. La otra cuestión que la funcionaria remarcó como importante es la tasa de incidencia que resulta cuando el número de casos confirmados acumulados de los últimos 14 días por cada 100 mil habitantes supera los 150. En esta última variable Rosario estaría en los 350 casos, una cantidad similar a la de la provincia, según indicaron fuentes de la Secretaría de Salud Pública.
En el primer indicador, el aumento de casos por quincena es en Santa Fe de 0,94, mientras que en Rosario permanece cercano al 1,05. Pero más allá de esta realidad favorable, desde el Palacio de los Leones optaron por la cautela. Esperan tener mayores definiciones en relación a los métodos de las mediciones, afinar los estudios y cotejarlos con el área de Epidemiología de la provincia. Sobre todo teniendo en cuenta que recién el lunes el gobernador Omar Perotti daría a conocer la modalidades de las restricciones que regirán a partir de ese día, siempre con el margen para que cada municipio y comuna adopte las medidas que crea convenientes según su panorama epidemiológico.
“Vamos seguir mirando todos los indicadores, queremos ser cautos. Desde la Nación se hace una evaluación de todo el territorio, pero cada provincia y municipio tiene su complejidad. No es lo mismo la Costa Atlántica que Rosario. Por eso la novedad de los anuncios es que involucran a cada distrito con el objetivos de analizar sus variables para tomar decisiones de mayor o menor restricciones”, analizó con prudencia la fuente consultada por La Capital.