Tres mujeres murieron y dos adolescentes desaparecieron en Jujuy cuando la crecida de un río en la puna arrastró a una camioneta. Y en Salta y en Santiago del Estero miles de pobladores permanecen aislados por las inundaciones.
Tres mujeres murieron y dos adolescentes desaparecieron en Jujuy cuando la crecida de un río en la puna arrastró a una camioneta. Y en Salta y en Santiago del Estero miles de pobladores permanecen aislados por las inundaciones.
Fuentes policiales de Jujuy dijeron que el accidente ocurrió anteayer sobre la ruta provincial 7, cerca de la frontera con Bolivia. Ayer rescataron los cuerpos de tres mujeres que perecieron ahogadas.
Además, seguía la búsqueda de una niña de 12 años y de una adolescente de 17, cuyos cuerpos fueron arrastrados por la corriente luego de que la camioneta Ford F-100 con 12 personas fue arrastrada por un afluente del río Grande.
Las fuentes señalaron que la camioneta cruzó una hondonada sobre la ruta 7, entre las localidades de Cienaguilla y Yoscaba, cuando quedó varada por la gran cantidad de lodo que arrastró la corriente, que estaba en creciente. Al parecer, los ocupantes de la camioneta no lograron bajar a tiempo de la camioneta cuando la rápida crecida del río arrastró también al vehículo.
Se indicó que siete de los ocupantes lograron sobrevivir y que anoche fue hallado a 300 metros del lugar el cuerpo de Esther Coria, de 35 años.
Agentes policiales rescataron los cuerpos de Jacinta Trejo, de 55 años, y de Viviana Mendoza, de 60, a casi diez kilómetros del sitio donde encalló la camioneta, mientras continuaba la búsqueda de las dos jóvenes.
La situación en el norte de Jujuy, así como en gran parte de esa zona del país, continuaba ayer complicada a raíz de las inundaciones que mantienen a más de diez mil personas aisladas en parajes de Salta y de Santiago del Estero.
En ese marco, la directora de prensa de la Municipalidad de La Quiaca, Mónica Nievas, indicó que "las condiciones climáticas no son buenas" porque continuaban las lluvias.
En Salta. Las lluvias continuaban ayer en el norte salteño, donde ya son más de 11 mil los aislados por la crecida del río Pilcomayo, a la vez que había amplias zonas sin agua potable por la rotura de tuberías y con restricciones en el suministro eléctrico a causa del derrumbe de una torre de alta tensión.
En Santa Victoria Este fuentes comunales dijeron que los habitantes están aislados pero no está inundado el pueblo, mientras en el departamento San Martín persistían los inconvenientes en la provisión de agua potable.
El sacerdote dominico Miguel Angel Céspedes aseguró que "está muy complicada la situación en parajes de la zona sur del departamento Rivadavia, donde por los desbordes de los ríos hay personas aisladas pero faltan medios para llegar a ellos".
"El agua se ha llevado casas y la gente se ha autoevacuado hacia los lugares más altos", acotó el sacerdote.
En tanto, en Santiago del Estero las inundaciones afectaron los departamentos de Figueroa y Alberdi, en donde evacuaron a unas 300 familias aisladas. l (Télam y DyN)
Por Matías Petisce
