El Ministerio de Salud de la Nación decidió incluir las lesiones por mordedura de perros en el Boletín Epidemiológico Nacional. Esta decisión se tomó debido a que las mordeduras de perro son la agresión más común de animales a personas y son consecuencia de la estrecha convivencia que en la vida cotidiana se da con estos animales de compañía, y presentan riesgos significativos para la salud.
Las autoridades sanitarias destacaron la importancia que tiene contar con un registro de este tipo de heridas, que tienen múltiples consecuencias, incluyendo enfermedades zoonóticas graves como la rabia, así como lesiones de diversa gravedad que pueden dejar secuelas e incluso causar la muerte. Además, también se destacan los costos económicos, el impacto social y el daño psicológico asociados a estas lesiones.
La medida fue publicada en el Boletín Epidemiológico Nacional en el marco de la semana epidemiológica y forma parte de las “Herramientas para la vigilancia, prevención y respuesta”. “La lesión por mordedura de perro es la agresión más frecuente de los animales al ser humano. Este evento surge de una estrecha convivencia que se ha visto modificada por el desarrollo y la urbanización, resultando en diversas modalidades de vínculo entre las personas y los caninos”, se detalla.
Si bien la información es limitada en Argentina, se destaca que entre 2004 y 2014 se atendieron 6.245 personas por mordeduras de perro, siendo el grupo etario más afectado los niños de entre 5 y 9 años. Las lesiones descritas varían en gravedad, desde simples excoriaciones hasta politraumatismos severos. Frente a esta situación, el seguimiento y registro de los cuadros médicos derivados de esas lesiones es vital para el control epidemiológico
Entre los argumentos citados para tomar la medida se establece una comparación con otros países, se citan estadísticas de Estados Unidos, donde aproximadamente 4,5 millones de personas sufren mordeduras de perro cada año, de las que 885.000 requieren atención médica y causan entre 10 y 20 fallecimientos. En países de altos ingresos como Australia, Canadá y Francia, se observan tasas de incidencia y letalidad comparables.
Qué hacer ante una mordedura de perro
En caso de sufrir una mordedura de un perro se recomienda lavar la herida con abundante agua y jabón, no colocar alcohol ni otro desinfectante, y concurrir rápidamente al centro de salud más cercano para ser evaluado por un médico.
Es importante verificar si la persona mordida ha recibido la vacuna antitetánica y, si el perro es desconocido o no cuenta con su carnet de vacunación, se recomienda iniciar un plan de vacunación antirrábica.
La mayoría de las mordeduras de animal sanarán sin desarrollar una infección ni disminuir la función del tejido. Algunas heridas necesitarán cirugía para limpiarlas y cerrarlas apropiadamente, incluso algunas mordeduras menores pueden necesitar puntos. Las mordeduras grandes y profundas pueden dejar cicatrices grandes.
Los expertos destacan que las mordeduras de perro son un tema de salud pública debido a su relevancia y los múltiples riesgos asociados, como las lesiones traumáticas, infecciones bacterianas y la posibilidad de contraer la rabia. Instan a los profesionales de la salud a reportar los casos a las autoridades sanitarias, proporcionando detalles sobre las circunstancias del incidente, la salud del animal, las lesiones y los tratamientos instaurados.
Cuándo llamar al médico
Los animales salvajes y las mascotas desconocidas podrían ser portadores de la rabia. Si ha sido mordido por un animal salvaje o callejero, comuníquese con su proveedor inmediatamente. Consúltele dentro de las 24 horas siguientes en caso de cualquier mordedura que rompa la piel.
Consulte con su médico o acuda a una sala de emergencias en caso de que se de los siguientes síntomas:
- Hay hinchazón, enrojecimiento o pus que sale de la herida.
- La mordedura es en la cabeza, la cara, el cuello, las manos o los pies.
- La mordedura es profunda o grande.
- Usted observa músculo o hueso expuesto.
- Usted no está seguro si la herida necesita puntos de sutura.
- El sangrado no se detiene después de algunos minutos. En caso de hemorragia grave, llame al 911 o al número local de emergencias.
- Usted no ha recibido una vacuna antitetánica en 5 años.