El brutal doble femicidio seguido de secuestro que sacude a Córdoba, tiene como protagonista a Luna Giardina, una joven estudiante de agronomía que fue asesinada junto a su madre, Mariel Zamudio, en su casa de Villa Serrana. El principal sospechoso es Pablo Laurta, su expareja y padre de su hijo Pedro Rodríguez, de cinco años, quien permanece desaparecido desde el sábado por la mañana.
En las últimas horas, se conocieron posteos estremecedores que Luna había publicado en sus redes sociales días antes del crimen. Mensajes que hoy, con el paso del tiempo, adquieren un dramatismo insoportable y parecen anticipar el desenlace.
“Todos los psicópatas son asesinos”, escribió en su cuenta de Facebook en febrero del año pasado, una frase que muchos de sus amigos interpretaron ahora como un reflejo del temor y el hostigamiento que sufría por parte de su ex pareja.
Cinco días antes de ser asesinada, Luna compartió otra publicación que también parece hablar de una relación marcada por la violencia y la manipulación:“Por tu propia salud mental, toma las señales confusas de las personas como un rotundo no”.
Pero sus últimos posteos también mostraban otro costado de su vida: el amor por su hijo y el esfuerzo por salir adelante. Cuatro días antes del crimen, publicó una imagen que decía “Las madres no tienen plan B”, y ella agregó: “Lo más hermoso”, acompañando la frase con una foto de Pedro, el niño que hoy continúa siendo intensamente buscado.
Apenas unas horas antes de ser asesinada, la joven había celebrado un logro académico. En un mensaje que hoy se lee con tristeza, escribió: “Vamos bien. ¡Qué lindo es llorar de felicidad! Lo que es para uno, siempre, siempre termina llegando. Gracias a Dios”.
El posteo fue publicado a las 23.46 del viernes. Doce horas después, Luna y su madre fueron asesinadas a tiros dentro de su casa.
Antecedentes de violencia
Según la investigación, Luna había escapado de Uruguay hace tres años junto a su hijo para alejarse de Laurta, quien había intentado ahorcarla en el marco de un episodio de violencia extrema. A pesar de las denuncias presentadas en la Justicia uruguaya y en Argentina, el agresor logró localizarla en Córdoba.
La mujer contaba con un botón antipánico, aunque no llegó a activarlo al momento del ataque. El caso está caratulado como “homicidio doblemente calificado” por mediar violencia de género y por el vínculo.
La búsqueda de Pedro y el pedido de captura internacional
Tras cometer los femicidios, Laurta huyó con Pedro, de cinco años, lo que motivó la activación del protocolo Alerta Sofía y un pedido de captura internacional de Interpol. Los investigadores sospechan que podría intentar cruzar a Uruguay, su país de origen.
El caso está a cargo de la Fiscalía de Instrucción de Violencia Familiar y de Género del 2° turno, bajo la dirección de Gerardo Reyes, que trabaja junto a la Unidad Judicial de Homicidios y fuerzas provinciales y federales.
Un caso que expone las fallas del sistema
El femicidio de Luna Giardina y su madre vuelve a poner en evidencia las debilidades estructurales del sistema de protección frente a la violencia de género. La víctima había pedido ayuda, había denunciado y contaba con botón antipánico, pero la respuesta institucional no alcanzó para evitar el crimen.
El caso generó consternación y reclamos de justicia en Córdoba y en redes sociales, donde organizaciones feministas y usuarios multiplicaron el pedido de aparición con vida de Pedro.
Mientras continúa el operativo de búsqueda, la comunidad de Villa Rivera Indarte permanece conmocionada. Los vecinos, que fueron testigos de los primeros movimientos policiales, no salen de su asombro ante un hecho que deja al descubierto una vez más la violencia extrema contra las mujeres.
Quienes tengan información sobre el paradero del niño Pedro Rodríguez Laurta (5 años) o del sospechoso Pablo Laurta, pueden comunicarse de manera inmediata al 911 o a la Fiscalía de Violencia Familiar y de Género del 2° turno.