Según el estudio, el hombre de
Aries es definido como "El único". No es casual porque es excesivamente directo y
posee un espíritu conquistador; a la vez que debajo de su aspecto pulcro se agazapa un animal con
las hormonas en ebullición, siempre listo para tomar la iniciativa sexual. Lo excitan las mujeres
más jóvenes, rubias y bronceadas, los aromas corporales y ser el amo en la cama.
En cambio la mujer de
Aries, "La original", siempre está dispuesta a satisfacer su propio y poderoso
impulso sexual dónde, cuándo y con quién le dé la real gana. Para ella, los hombres son verdaderos
"objetos sexuales" y la excitan los más jóvenes, morenos, con barba de tres días, los strippers y
las fantasías de estar con un desconocido.
El hombre de
Tauro es "El ídolo", es un amante lento y reflexivo, extraordinariamente capaz de
mantener maratónicas sesiones sexuales, no le agradan las escenas de sexo colectivo pero sí las
lésbicas. Y lo excitan las mujeres dominantes, casadas y de rasgos oscuros.
A su vez las mujeres de
Tauro, "El ideal", anhelan una relación tradicional, chapada a la antigua. Es la
ninfa mundana del zodíaco y signo de la respuesta sexual, una receptora reactiva en el dormitorio
que se entusiasma con el papel tradicional de mujer. Las
excitan los hombres altos, de torso suave y jugar a la prostituta de lujo.
Géminis es el signo de la estimulación sexual, por eso el hombre nacido entre el
22 de mayo y el 21 de junio es reconocido como "El pillín". Se plantea de manera consciente qué es
lo que hace falta para ser bueno en la cama, por eso es el que mejor y más rápido logra poner en
clima a la mujer que lo acompañe. Sin dudas, lo excitan las chicas de barrio, lencería, los
strip-teases y regalar collares de perlas.
No hay mujer que provoque tanto revuelo como la
geminiana, a quien se la conoce como "El don". Pone toda la carne en el asador y
más para conseguir cualquier meta. Es la que irrumpe en el ruedo sexual y mordisquea la manzana sin
mayores preguntas. La excita hacerse la ingenua, los profesores y el juego médico/enfermera.
El signo de potencial sexual es el de
Cáncer. El hombre aquí es "El galán", por eso considera al sexo como un acto de
adoración, en virtud del cual se entrega por completo a su compañera. Lo enloquecen las mujeres
agresivas, altas y de pechos grandes, los arrumacos y el porno casero.
"La perla", esa es la mujer de
Cáncer. Libertaria en su enfoque de vida, se guía por instintos viscerales y sus
acciones pueden parecer incontroladas o irracionales. La excitan los hombres altos, nórdicos,
universitarios y deportistas y la atraen las
fantasías de sumisión.
Quien mejor asume papeles de liderazgo tanto en lo social como en lo sexual ese es el hombre de
Leo, "El natural". No se enamora con facilidad pero cuando lo hace lo ve como algo
sagrado, por eso su vida sexual rara vez presenta algo vicioso o sórdido. Vive la vida como un rey
y satisface con seguridad sus deseos. Si hay algo que lo excitan eso es el sexo suave, las
caricias, el sexo al aire libre y la posición del misionero.
"La rompedora" es la mujer de
Leo. Ardiente de deseo, ataca la vida y sin la menor timidez proclama su interés
sexual en una posible pareja, con la que luego se demuestra una tempestuosa gata salvaje en el
dormitorio. Le gustan los hombres de piel morena, los latinos y que la filmen.
A pesar de su aspecto, el hombre de
Virgo, "El vehículo", es atento hasta la exageración en la cama, donde demuestra
conocimiento y destreza carnales que indican una asombrosa empatía con las necesidades sexuales
femeninas. Lo vuelven loco las mujeres mayores con experiencia, "jugar al doctor" y las
máscaras.
La mujer de
Virgo es "El recipiente". Complacer a su amado es prioridad en sus planes eróticos
y más que ninguna trata a su chico como amo y señor. La excitan los creativos de alto nivel,
roqueros y "jugar a la secretaria".
El signo del talento sexual es el de
Libra. El hombre es conocido como "El personaje". Para él el amor es un encuentro
de mentes y por eso la mujer elegida debe compartir su apreciación por los ideales intelectuales y
un enfoque sensual, cuando no etéreo, del sexo. Lo excitan los modelos de adoración, el voyeurismo
y los toques sensuales.
La mujer de
Libra es "El encanto". Sus planes de amor pasan por unirse a un amigo de verdad,
librepensador como ella, pero en el sexo se presta a relaciones promiscuas con alguien que piense
igual y de hecho es reacia a los vínculos a largo plazo. Pero si se compromete, exige completa
fidelidad. ¿Qué la excitan? Los artistas, los sensibles y juegos intensos.
La obsesión sexual es la clave para entender a los
escorpianos. Para el hombre, "El desconocido", el sexo ocupa un lugar muy
importante y lo que suele suceder con los escorpianos en la cama es demasiado subido de tono para
hablarlo a la luz del día. Sí se puede anticipar que lo excitan los juegos de amos/esclavos y la
pornografía.
La mujer de
Escorpio, "El espécimen", es la indiscutible "femme fatale" del zodíaco, que
recurre a esa notable indiferencia como cebo como para que trabaje aún más para atraer su atención.
Luego quiere el paquete completo de un hombre, de quien procura sacar las mejores cualidades que
tiene. La enloquecen los morenos, el vello corporal, los espejos y el sexo con ropa.
El signo del éxtasis sexual es el de
Sagitario. Los sagitarianos son conocidos como "Los inconformistas", son
románticos y efusivos. Los atraen físicamente las mujeres "diez" y no se acobarda al insinuarse a
semejantes amazonas del glamour. Es un ídolo muy codiciado. Lo excitan las azafatas, los masajes
eróticos y las mujeres casadas.
Más conocida como "La experta", la mujer de
Sagitario tiene como lema: "Más, más y más", tanto en su vida profesional como
privada. Preside la experiencia con un aire de que se merece todo lo que desea. La excitan los
ejecutivos, los atletas, la adulación y el juego de rol de prostituta.
El hombre de
Capricornio es "El puntilloso" del zodíaco. Su pareja perfecta es una esposa muy
señora que comparta sus criterios tradicionales y no cuestione su autonomía. Prefiere las mujeres
mayores y más bien sumisas. Lo excitan las fantasías de represiones femeninas, ser el amo de la
relación y el voyeurismo. También las bibliotecarias y las enfermeras.
"La durmiente", así es reconocida la mujer de
Capricornio. No se precipita en una relación, sino que deja más bien que los
sentimientos vayan floreciendo, y si se la mira a los ojos se sabe bien que no es alguien con quien
se pueda jugar. Estas cualidades no impide que la exciten los hombres de cabellos oscuros,
intelectuales, con uniforme y provocar exhibicionismo.
Acuario es el signo de la evolución sexual. El hombre es definido como "El
visitante" y como un gurú muy experto su comportamiento dice: "Sé algo que tú no sabes", es en ese
momento en que las posibles parejas caen bajo el hechizo de este semidios/demagogo. Lo excitan las
mujeres dominantes, africanas, asiáticas, las ejecutivas y también los intercambios de parejas.
La mujer de
Acuario, "La visión", es una inspiración. Es más sexual que sensual y valora al
hombre que anda sin rodeos. Par ella el sexo no tiene por qué tener un significado: es lo que es.
La enloquecen los camioneros, los hombres más jóvenes o papis mayores, los forcejeos y el sexo
ocasional. También posar y los disfraces.
El hombre de
Piscis es "El errante". Tiene cierta afición por las mujeres inexpertas, ingenuas
y descaradas. Es la personificación de Eros, por eso nada lo fascina ni sorprende de sobremanera.
Así, puede entrar en una escenario sexual decadente, incluso como despistado participante, y salir
indemne. Eso sí lo excitan las mujeres mayores y rellenitas, la belleza gótica y la inversión de
roles.
La mujer de
Piscis representa "El sueño". Las piscianas obtienen su mayor satisfacción siendo
receptoras pasivas, es una víctima proverbial del amor, que disfruta sobre todo del erotismo.
Siempre tiene en mente el deseo de complacer a un hombre. Las excitan los cuerpos suaves, con
rasgos delicados, el masaje y las charlas en la cama.