Un anciano murió ayer tras ser arrollado por un automovilista en el barrio porteño de Flores, en la avenida Rivadavia 7100 entre Culpina y Varela.

Un anciano murió ayer tras ser arrollado por un automovilista en el barrio porteño de Flores, en la avenida Rivadavia 7100 entre Culpina y Varela.
Por causas que se investigaban, un hombre de 82 años perdió el control de un automóvil Subaru Legacy, con una calcomanía de discapacidad y caja de cambios automática, una de las modificaciones que suelen aplicarse a vehículos de personas con limitaciones físicas, mientras circulaba por la avenida Rivadavia.
El vehículo, en el que también se trasladaba el hijo del conductor, un hombre de unos 50 años, ascendió a una vereda y atropelló a varias personas que aguardaban en una parada el paso de un colectivo.
De inmediato, un grupo de personas que observó el siniestro recriminó la maniobra al conductor del Subaru Legacy, quien aceleró en reversa y chocó la parte trasera de un automóvil Fiat, para luego embestir a otros transeúntes.
El automovilista detuvo la marcha del vehículo a una cuadra del lugar del accidente, donde fue detenido por agentes de la comisaría 38, quienes evitaron que fuera agredido por varios testigos, quienes continuaban recriminándole la maniobra fatal.
Producto del accidente, nueve personas sufrieron heridas, dos de las cuales fueron atendidas por médicos en el lugar del hecho, mientras las otras fueron trasladadas a dos hospitales, tras ser distribuidas en ambulancias del Sistema de Atención Médica de Emergencia.
Médicos de emergencias y voceros de la Policía Federal dijeron que un hombre, un italiano de 82 años identificado como Gennarino Testa, falleció mientras era atendido en el Hospital Piñeyro donde fue derivado con otras víctimas, debido a las lesiones padecidas en el accidente.
Por su parte, el conductor del vehículo, identificado por las fuentes de la fuerza de seguridad como Oscar Perona, permanecía anoche detenido en una comisaría.
Según dijeron algunos testigos, el conductor del Subaru Legacy, cuando era llevado a la seccional adujo que se le había "trabado" la caja de cambios automática.
Un jefe policial explicó que el conductor se asustó luego de arrollar al anciano y cuando la gente comenzó a recriminarlo dio marcha atrás. En esa maniobra embistió a otras cuatro personas. l (Télam y DyN)


