Una escuela pública del Chaco que no cuenta con edificio propio tuvo que dejar el lugar en el que funcionaba de prestado y los docentes y alumnos expresaron su angustia por quedarse en la calle.
Una escuela pública del Chaco que no cuenta con edificio propio tuvo que dejar el lugar en el que funcionaba de prestado y los docentes y alumnos expresaron su angustia por quedarse en la calle.
Se trata de la Escuela de Enseñanza Superior (EES) Nº-162, ubicada en el paraje Cuarta Legua sobre la ruta provincial 3, a unos 15 kilómetros al norte de la ciudad chaqueña de Pampa del Indio, que fue creada por el gobierno provincial en 2011 sin haber contado con un edificio propio.
Esta zona del Chaco tuvo presencia en la prensa nacional en diciembre cuando se conoció la historia de Efraín Abel Delgado, el chico abanderado que todos los días caminaba 6 kilómetros para llegar desde su casa hasta la escuela rural 239 en la que finalmente terminó la primaria.
El viernes 3, el gobierno del peronista Domingo Peppo comprometió un presupuesto de 26.988.448,20 pesos "para la ampliación y refacción del edificio de la EES Nº 162, que se concretará por medio del programa Promer II", pero esta institución jamás tuvo aulas propias.
Los docentes tuvieron que conseguir durante siete años un lugar prestado para dar clases, siempre en casas, galpones y hasta en patios (debajo de los árboles) de conocidos que ofrecieron su ayuda solidaria a cambio de nada.
La escuela tuvo que trasladarse tres veces desde su fundación, lo cual conllevó una serie de dificultades y complicaciones que empujaron a algunos chicos a no poder continuar con sus estudios.
La escuela cuenta con 30 trabajadores, entre el director, secretario, docentes y auxiliares, y 150 alumnos entre primer a quinto año, de los cuales el 90 por ciento pertenece a la comunidad aborigen qom.
Los docentes estaban listos para iniciar las clases en instalaciones prestadas por la comunidad qom, pero hace pocos días le pidió a los docentes retirar sus pertenencias.
Estos maestros dan clases a chicos de escasos recursos económicos de la zona rural de Pampa del Indio que no tienen los medios para trasladarse hasta otra institución donde continuar los estudios.
Tras perder el miércoles el galpón en el que estaban por dar clases, los docentes salieron a buscar desesperadamente otro sitio y lograron acceder a un salón comunitario a un kilómetro de distancia, que tiene muchas deficiencias, pero al menos cuenta con techo y paredes donde colgar los pizarrones.
"Tuvimos que trasladar las cosas de la escuela en motos y vehículos prestados", dijeron los docentes.
Los docentes habían recibido la donación de los terrenos (con título) para la construcción de la escuela, pero están esperando que el Gobierno provincial de señales sobre el presupuesto y el inicio de la obra esperada desde hace siete años.
Javier Alvarez
Noticias Argentinas
Por Azul Martínez Lo Re