El gobierno de Estados Unidos puso en marcha grandes operativos en nueve ciudades con el objeto de detener a más de 2.000 inmigrantes "ilegales" susceptibles de ser deportados, informaron fuentes gubernamentales. Se cumplió así la promesa de Donald Trump, que causó indignación y a la vez una ola de temor entre las posibles víctimas del servicio de inmigración federal.
Los operativos, anunciados la semana pasada de manera algo insólita por el presidente Trump a través de Twitter y en conversación con periodistas en la Casa Blanca, no fueron confirmados oficialmente por el gobierno pero sí por fuentes oficiales no identificadas a varios medios periodísticos norteamericanos.
"No hablaré específicamente de nada de lo que está pasando desde el punto de vista de las operaciones", dijo a la televisora Fox News el director del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE, en inglés), el organismo encargado de las redadas, Matthew Albence. La ICE es especialmente temida por los migrantes y muy criticada por las ONG que tratan de darles auxilio.
Las acciones fueron confirmadas por voceros gubernamentales no identificados al diario The Wall Street Journal y a las televisoras CBS, CNN y NBC, entre otros medios, según reportaron las agencias de noticias ANSA, EFE y Europa Press.
Albence explicó que el objetivo de las redadas es detener a "individuos específicos, que vinieron ilegalmente a este país, tuvieron la oportunidad de reclamar asilo a un juez de inmigración y la mayoría de ellos eligió no darse esa oportunidad".
Las operaciones se llevaban a cabo en Atlanta (Georgia), Baltimore (Maryland), Chicago (Illinois), Denver (Colorado), Houston (Texas), Miami (Florida), Nueva York (Nueva York) y Los ngeles y San Francisco (ambas en California).
En cambio, no se efectuaban en Nueva Orleans, donde también estaba previsto hacerlas, debido a que esa ciudad fue afectada por la tormenta tropical Barry, precisaron las fuentes.
Las redadas comenzaron el sábado en Nueva York, cuyo alcalde, el progresista Bill De Blasio, informó en rueda de prensa que hubo tres operaciones sin detenidos y que ayer no había habido ninguna otra. "Esto es lo que sabemos en estos momentos: tres situaciones que confirmamos ayer, en las que estuvieron involucrados agentes del ICE, con testigos que nos lo confirmaron; en ninguno de los casos los agentes del ICE encontraron a nadie y literalmente no hubo actividad hoy", afirmó De Blasio.
Según fuentes citadas por The Wall Street Journal, esos operativos se realizaron en los barrios Harlem y Sunset Park, pero los agentes del ICE fueron rechazados por los vecinos porque no tenían órdenes de arresto.
Asimismo, Fox News reportó que un funcionario gubernamental de alto rango le dijo que las redadas comenzaron el sábado a la noche en "varias jurisdicciones", no solo en Nueva York.
El director interino del Servicio de Inmigración y Ciudadanía (Uscis, en inglés), Ken Cuccinelli, dijo a CNN que no daría "detalles" de las redadas para no poner en peligro a los agentes del ICE y se negó a responder si había garantías de que las familias de inmigrantes no serían separadas durante las operaciones, pero advirtió que "hay un millón de personas, incluidas familias, con órdenes de expulsión".
En cambio, el comisionado interino de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés), Mark Morgan, sostuvo que las redadas no procuran la separación de familias porque "esa no es la intención, nunca lo fue y nunca lo será".
Cuccinelli agregó que la prioridad de las redadas es detener a criminales violentos y a delincuentes con causas agravantes, y aseguró que no se está persiguiendo a acusados de cruzar ilegalmente la frontera, hecho que es considerado un delito menor.
Las redadas fueron anunciadas el viernes por Trump, después de que fueran reveladas por el diario The New York Times. Sin embargo, el mandatario no volvió a mencionarlas en una serie de mensajes que emitió hoy por Twitter, en los que subrayó que la visita que el vicepresidente Mike Pence hizo el viernes a dos centros de detención de inmigrantes en Texas "demostró claramente lo bien que están gestionados y lo limpios que son".
Denuncia de legisladoras
El "caucus" o bancada progresista ha pedido juicio político contra Donald Trump, después de que éste recomendara a las congresistas de ascendencia extranjera que abando naran Estados Unidos y volvieran "a sus países". "Me resulta muy interesante ver a las congresistas demócratas ‘progresistas', que proceden de países cuyos gobiernos son una completa y total catástrofe, y los peores, los más corruptos e ineptos del mundo (cuando siquiera funcionan), decir en voz alta y con desprecio al pueblo de Estados Unidos, la nación más grande y poderosa sobre la Tierra, cómo llevar el Gobierno", escribió en Twitter. "¿Por qué no vuelven a sus países y ayudan a arreglar esos lugares, que están totalmente rotos e infestados de crímenes. Entonces que vuelvan aquí y nos digan cómo se hace", añadió en su mensaje. El grupo de mujeres representa a un sector del Partido Demócrata mal avenido con la cúpula más moderada que lidera la máxima responsable del partido en la Cámara de Representantes del Congreso, Nancy Pelosi, que descarta el juicio político de Trump.
detenidos. El servicio federal ICE apresa a los inmigrantes como si fuesen delincuentes peligrosos.