Ataques israelíes en la Franja de Gaza mataron al menos a 32 personas este domingo, incluidos seis niños en un punto de recolección de agua, mientras que el número de muertos palestinos superó los 58.000 después de 21 meses de guerra, según afirmaron funcionarios locales de salud.
Israel dice que terminará la guerra una vez que Hamás se rinda, se desarme y se exilie, algo que el grupo se niega a hacer. Hamás dice que está dispuesto a liberar a los 50 rehenes restantes, de los cuales se dice que unos 20 están vivos, a cambio de un fin a la guerra y la retirada total de las fuerzas israelíes.
Frustradas, las familias de algunos rehenes se manifestaron frente a las oficinas del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu. “La abrumadora mayoría de la gente en Israel ha hablado fuerte y claro: queremos hacer un trato, incluso al costo de terminar esta guerra, y queremos hacerlo ahora”, dijo Jon Polin, padre de Hersh Goldberg-Polin, un rehén israelí-estadounidense asesinado en cautiverio.
A lo largo de la guerra en Gaza, la violencia también aumentó en Cisjordania, territorio ocupado por Israel, donde el domingo se llevaron a cabo funerales para dos palestinos.
En el centro de Gaza, funcionarios del Hospital Al-Awda dijeron que recibieron 10 cuerpos después de un ataque israelí en un punto de recolección de agua en Nuseirat, también en el centro de Gaza. Entre los muertos había seis niños.
El ejército israelí aseveró que las tropas apuntaron a un militar, pero que un error técnico hizo que su munición cayera “a decenas de metros del objetivo”.
Funcionarios de salud dijeron que un ataque israelí alcanzó a un grupo de ciudadanos que caminaban por la calle el domingo por la tarde en el centro de la Ciudad de Gaza, matando a 11 personas e hiriendo a unas 30.
El doctor Ahmed Qandil, especialista en cirugía general, estaba entre los muertos, indicó el Ministerio de Salud de Gaza. Uno de los portavoces del ministerio, Zaher al-Wahidi, dijo a la AP que Qandil se dirigía al Hospital Bautista Árabe Al-Ahli.
En la ciudad central de Zawaida, un ataque israelí a una casa mató a nueve personas, incluidas dos mujeres y tres niños, según personal del Hospital Mártires de Al-Aqsa. Más tarde, el Hospital Al-Awda dijo que un ataque a un grupo de personas en Zawaida asesinó a dos.
El Ministerio de Salud de Gaza afirmó que más de la mitad de los más de 58.000 muertos en la guerra son mujeres y niños, aunque el ministerio (bajo el gobierno de Hamás en Gaza) no distingue entre civiles y combatientes en su conteo. La ONU y otras organizaciones internacionales consideran sus cifras como las estadísticas más confiables de la guerra.
El ataque liderado por Hamás el 7 de octubre de 2023, que desató la guerra, mató a unas 1.200 personas y secuestró a 251.
El ministro de Energía de Israel, Eli Cohen, dijo que el país no ayudará a reconstruir la infraestructura en Gaza. “Gaza debe seguir siendo una isla de ruinas durante las próximas décadas”, aseveró.