Jerusalén/Gaza.— La organización islamista Hamas reaccionó ayer con
demostraciones de fuerza y lanzando más cohetes contra Israel tras la retirada de las tropas
hebreas, que mataron a más de un centenar de palestinos en cinco días de operaciones en la Franja
de Gaza. No obstante, el primer ministro israelí, Ehud Olmert, dejó en claro que la retirada no es
definitiva. "Estamos en medio de una guerra. Lo que ha ocurrido recientemente no es sólo cosa de un
día", advirtió.
Miles de adeptos de Hamas celebraron la retirada israelí
como una "victoria", desfilando por las calles del campo de refugiados de Yabalia, lugar en el que
se concentraron las recientes incursiones.
La operación Invierno Caliente, llevada a cabo por Israel
en reacción al lanzamiento de cohetes palestinos, dejó en la Franja el mayor número de víctimas
desde la Guerra de los Seis Días, con 116 muertos y 350 heridos, entre ellos numerosos civiles.
Sin embargo, las ciudades israelíes de Sderot y Ashkelon
continuaron recibiendo ayer el impacto de proyectiles desde Gaza. Según la Inteligencia militar
israelí, los palestinos lanzan cada vez más cohetes Grad de producción iraní, con un alcance mayor
al de los Kassam de fabricación artesanal.
Golpe a los terroristas. Pese a todo, el ministro de Defensa, Ehud Barak, aseguró
que las incursiones "asestaron un golpe muy duro a los terroristas", aunque precisó que el problema
de los cohetes no se puede solucionar de una vez. "Nuestra misión es reestablecer la tranquilidad,
y eso es lo que haremos", agregó.
Por su parte, el cofundador de Hamas Mahmud a-Zahar amenazó
con vengar el derramamiento de sangre de los últimos días y aseguró que, si Israel lanza una
operación a gran escala, la organización contestará capturando a más soldados y no teniendo
"ninguna piedad" con ellos.
Según A-Zahar, Hamas sólo pondrá en libertad al soldado
israelí Gilad Shalit, retenido por militantes palestinos desde hace casi dos años, si Israel cumple
las condiciones impuestas por Hamas. Entre ellas se encuentra la excarcelación de presos del
grupo.
Escudos humanos. En tanto, el presidente israelí, Shimon Peres, acusó a Hamas de
utilizar a mujeres y niños como escudos humanos. Según medios israelíes, Peres dijo a su colega
húngaro, Lazlo Solyom, de visita en Israel, que Hamas dispara a propósito cohetes desde zonas
densamente pobladas, aceptando que luego los ataques del ejército israelí acaben con las vidas de
civiles.
En cualquier caso, la alta comisionada de la ONU para los
Derechos Humanos, Louise Arbour, pidió ayer una investigación independiente sobre la muerte de
civiles en los últimos días de operaciones, al tiempo que condenó el "desproporcionado uso de la
fuerza" por parte del ejército hebreo.