Las pesquisas que lleva a cabo la Justicia de Brasil sobre los sobornos que el gigante de la construcción Odebrecht repartió en América latina y dos países africanos para obtener contratos millonarios alcanzó al ex presidente mexicano Felipe Calderón, según una investigación de Méxicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI). Una de las evidencias que involucra a México es un correo electrónico entre dos ejecutivos de Odebrecht: Roberto Prisco Ramos y Alexandro Alencar, quienes conspiraron para que el entonces presidente Luiz Inacio Lula da Silva intercediera ante su par Felipe Calderón para beneficiar la inversión brasileña en México, más específicamente en Pemex (Petróleos Mexicanos). El mensaje, que forma parte del expediente al que MCCI tuvo acceso, está fechado el 8 de diciembre de 2009, justo a la mitad del gobierno calderonista (2006-2012) y cuando estaba por cerrar un negocio con Braskem, filial de Odebrecht, que le dejaría ventas estimadas en dos mil millones de dólares anuales: la planta Etileno XXI, que se encuentra en Coatzacoalcos, Veracruz. Pemex le cedió a Braskem y a la compañía mexicana IDESA la construcción de la planta Etileno XXI. A cambio de esta inversión, México dejaría de importar polietileno y habría empleos, según las estimaciones oficiales. Además Pemex canceló tres proyectos de infraestructura propios, para no competir con la inversión de Odebrecht.