El sábado 28 de septiembre se realizará en la Facultad de Ciencias Exactas, Ingeniería y Agrimensura de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) una nueva edición del Torneo Argentino de Programación (TAP). Integrantes de los tres equipos que representaron a la Universidad local en los últimos mundiales estarán a cargo de la organización y coordinación del evento.
El TAP es una competencia por equipos de tres estudiantes de la misma institución educativa. Tiene cinco horas de duración, en las que cada equipo deberá resolver un conjunto de problemas algorítmicos, creando un programa que solucione cada uno. Antes del comienzo, la idea es realizar una especie de instancia previa que sirva como calentamiento para lo que va a suceder entrada la jornada.
“La idea es chequear el correcto funcionamiento de las máquinas y poder ayudar a los participantes a prepararse para el verdadero desafío que será a partir de las 14”, indicó Brian Morris, quién junto a Maximiliano Redigonda e Iván Díaz participó en dos citas mundialistas: Rapid City 2017 y Oporto 2019.
Rosario no es la única sede en la que se desarrollará el torneo, sino que se hará en nueve locaciones a la vez. “Desde nuestra primera participación, la UNR ha estado presente en cada uno de los Mundiales. El TAP es el primer paso para volver a estar presentes nuevamente en la edición que se hará el año que viene”, comentó Pablo Zimmermann, integrante del equipo “Caloventor en Dos” que en 2016 tuvo una destacada actuación y se coronó campeón latinoamericano. El combinado estaba también conformado por Mariano Crosetti y Martín Villagra.
Los equipos que representaron a las UNR en la máxima instancia mundial no pueden seguir compitiendo, ya que el reglamento limita un máximo de dos participaciones. Sin embargo, se han organizado para ponerse al hombro esta instancia y poder seguir ayudando a que la Universidad siga desarrollándose en esta disciplina. “Si bien no podemos competir, todos vamos a estar participando en distintas tareas para el TAP de Rosario. Algunos estamos en la organización y otros entrenan algunos de los equipos. También hay personas que no participaron en ningún mundial, pero nos están dando una mano. Es un proceso que sigue su curso y nos sentimos identificados”, dijo Fernando Fiori, quien junto a Margarita Capretto y Emilio López representó a la UNR en el Mundial de 2018.
El Torneo Argentino de Programación tiene más de veinte sedes en simultáneo y por cada una clasifican cuatro equipos para competir en un regional, donde participan equipos de distintos lugares de Latinoamérica. En esta instancia, en la que se conocen los tres representantes que irán al Mundial, existe una regla que busca distribuir la participación geográfica y por eso sólo puede clasificar un combinado por universidad.
Pero no sólo participan dentro de la clasificación local equipos de la UNR sino que pueden participar de cualquier universidad nacional. “Por ejemplo, equipos de la UTN de Rosario van competir con nosotros y obviamente personas de otros lados. Con los años nos hemos convertido en una sede fija de esta competencia, lo que habla del recorrido que se ha ido realizando y la valoración a nivel nacional que se ha conseguido.”, analizó Morris.
La competencia al interior de la universidad será grande este año, ya que están confirmados cuatro equipos para el TAP y aún pueden sumarse más. “Hicimos un taller sobre la temática porque vimos que había mucho interés entre los chicos. Se sumó una gran cantidad de estudiantes de primero y segundo año, por lo que creemos que habrá más equipos que se inscriban para participar en esta edición. Vimos un gran entusiasmo y nos pone contentos porque hay mucho potencial”, resaltó Fiori.
Si bien los combinados pertenecientes a la Universidad Nacional de Rosario están conformados por mayoría de estudiantes que tendrán su primera experiencia en este tipo de torneos, cuentan con la dirección de los participantes de las anteriores ediciones. “La mayoría son nuevos, pero estuvieron entrenando y participando de distintas instancias. Sólo uno de los equipos se presentó el año pasado y llegó hasta la etapa regional. Se hizo un campo de entrenamiento en Córdoba hace unos meses y la mayoría fue a practicar allí. No tenemos equipos con trayectorias largas, pero creemos que entre lo que estuvieron entrenando y lo que nosotros podamos aportar, van a hacer un buen papel”, confió Morris.
Presencia local
La Universidad Nacional de Rosario ha estado presente en las últimos cinco mundiales, dejando fuera a otros equipos importantes de la región y cumpliendo un destacado papel en la máxima competencia. La Universidad Nacional de Córdoba y la Universidad Nacional de Buenos Aires tienen una larga historia dentro de la competencia y cuentan con una importante estructura de entrenamiento. Sin embargo, la UNR ha logrado sumarse al lote de los candidatos a base de muy buenas actuaciones que lo catapultaron a ser un rival difícil de vencer.
Al menos 10 participaciones de equipos de la UNR habían intentado clasificar al Mundial en el período 2007-2013. En 2014 se dio la primera clasificación y en 2016 la universidad se quedó con el título de campeón de Latinoamérica en Phuket, Tailandia. Desde entonces la participación y dedicación no ha parado de crecer. “Lo que construimos fue importante, porque mucha gente nos decía que era imposible clasificar la primera vez y este proceso demuestra que no éramos una excepción a la regla. Hoy por hoy no es sorpresa que Rosario se clasifique al mundial, ni que tenga buenas competiciones. Se está construyendo una tradición en la UNR y esperamos que siga así.”, manifestó Zimmerman.