Comienza a subir la temperatura y Rosario empieza a palpitar un verano que tendrá 25 paradores de las islas en tres sectores distintos, con una gran oferta diferenciada con distintos perfiles de bañista y la posibilidad de cruzar desde tres puntos de embarque: Costa Alta, Ricardo Núñez y la Nueva Terminal Fluvial por entre 2.500 y 3.500 pesos.
Esta semana se reunió el Consejo Consultivo del Río, un organismo creado en 2022 por el Concejo que coordina estrategias entre actores públicos y privados para el desarrollo de servicios y actividades en el Paraná. El organismo definió costos y fecha de lanzamiento de los cruces.
Con respecto a paradores, los que estaban funcionando hasta marzo, cuando terminó la temporada de verano 2022/2023, eran 25 repartidos entre tres grandes áreas: la isla La Invernada, las costas del Paraná Viejo y el Banquito San Andrés. Este relevamiento puede tener cambios para este año.
En La Invernada están ubicados Isla Verde, el Bodegón, La Pulpería del Kayakista, Áfrika, Copacabana, La Casita de Enfrente, Parador Bambú, Club del Río, Sale Isla, Rancho Aparte, La Privada, Lo de Pascual, Tauro, Maui y Varsovia. En el Paraná Viejo están instalados La Tribu, El Pimpollal, Garden Beach Club, Wilson Parador, Capibara Restaurante y Los Benitos Ecocamping. En el Banquito San Andrés siguen los mismos cuatro: Punta Arenas, Vladimir, Déjà Vu y Sudestada.
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Los paradores están repartidos entre tres grandes áreas de las islas: la Invernada, las costas del Paraná Viejo y el banquito San Andrés
Algunas de estas instalaciones cobran estadía, mientras otras no lo hacen. Lo mismo sucede con el ingreso de bebidas: algunas lo permiten y otras no. Los servicios que brindan, que varían según cada caso, son gastronomía; tragos y bebidas; parrilleros; camping, cabañas o dormis; canchas de vóley, fútbol y tenis playa; metegol; slackline; telas; guardavidas; duchas en playa, predio o en baños; alquiler de kayaks o tablas de SUP (Stand Up Paddle); pesca; y cabalgatas.
Con respecto a los valores del traslado, en zona norte ya están cruzado todos los días los taxi lancha. Desde Costa Alta cuestan 3.000 pesos; desde Ricardo Núñez 2.500 pesos los 800 metros hasta La Invernada, pero al Paraná viejo, con una distancia de 3 kilómetros, valen 3.000 pesos.
Desde la estación fluvial las salidas comenzarán a partir del 4 de noviembre, y se mantendrán los fines de semana y feriados hasta diciembre, cuando arrancarán todos los días. Los 3,5 kilómetros hasta el Banquito San Andrés costarán 3.500 pesos, menores de 10 años pagarán 2.000 y discapacitados, mostrando el certificado, cruzarán sin cargo.
"Tenemos todo listo para arrancar en el primer fin de semana de noviembre. El muelle del Enapro construido hace dos años ya está autorizado por Prefectura. La gente puede bajar y movilizarse hasta uno de los cuatro paradores o a alguna playa", detalló Ricardo Terán, gestor de desarrollo turístico de la Nueva Terminal Fluvial.
Desde ahí saldrán diferentes lanchas, una grande de 80 personas y las trackers con capacidad para entre 12 y 15 que son un poco mas rápidas. De hecho, se piensa más adelante en una tarifa desdoblada que incremente el precio en este servicio diferencial.
También va a haber un pasaporte turístico que va a juntar el servicio del bus Rosario City Tour con el cruce a la isla Sabino Corsi (el Banquito). Durará 48 horas e incluirá en ese lapso la posibilidad de subirse y bajarse de los colectivos, más un cruce en lancha al Banquito San Andrés y el día de playa. El precio para adultos será de 11.500 pesos, y jubilados y niños 6.500. Los días habilitados para el ómnibus van a ser viernes y sábados, y el cruce por el río los sábados y domingos.
Familia, turismo o amigos
El perfil que se busca en el Banquito será más familiar, para turistas o amigos pero en plan más relajado. En cambio, el norte siempre es sinónimo de contingentes más jóvenes con una búsqueda de música y celebración.
"Estamos bregando para que el cruce sea seguro y las lanchas tengan todas las condiciones que Prefectura pide que se cumplan, que ya está incrementando los controles, inspeccionando muelles y asegurándose que todo sea legal y prolijo, y que no haya mas informalidad, porque es un riesgo", apuntó Terán.
El gestor de desarrollo turístico recordó que las embarcaciones con patente REI no pueden cobrar ticket, ya que son deportivas y tienen un uso familiar o de amistades. Salen de guarderías. En cambio las mercantes matrícula M, como gomones, trackers o lanchas pasajeros, sí pueden hacer cruces comerciales ya que son controladas por la fuerza federal que emite certificado de navegación, matrículas, despachos y seguros.