Los choferes de la línea 35/9 decidieron ayer restringir parcialmente el ingreso a Villa Gobernador Gálvez en reclamo de mayor seguridad, y amenazaron con endurecer su postura si no reciben hoy una respuesta "concreta y satisfactoria" a sus reclamos por parte de las autoridades políticas y policiales. Hoy, a las 8, tendrá lugar en la Municipalidad una reunión con los delegados para tratar justamente este tema y ver si se puede destrabar el conflicto y normalizar el servicio.
La medida abarcó al ramal que ingresa a la ciudad por San Martín (continuación de Ayacucho), y llega hasta el cementerio. Los colectivos finalizaron su recorrido a la altura del frigorífico Sugarosa, aunque por la tarde fueron más flexibles y lo hicieron hasta Soldado Aguirre y Buenos Aires, en la esquina donde se levanta el estadio del club Coronel Aguirre, para retornar y permanecer en la cuadra de Filippini y San Diego.
Mientras tanto, el ramal que ingresa por avenida Perón (donde se levanta el frigorífico Swift) trabajó normalmente, pero los delegados de la empresa dijeron que también podría verse afectado.
Inseguridad. El reclamo de los choferes se originó en situaciones de inseguridad que se registraron los últimos días, aunque fuentes policiales dijeron que no hubo en ningún caso una denuncia formal. "A un compañero le sacaron la ropa en la parada del cementerio, a otro no le pudieron robar la caja con la recaudación y lo golpearon", contó a LaEN_SPACECapital Néstor De Armas, delegado gremial que durante la jornada de ayer llevó la voz cantante de los choferes. "Venimos con esto desde hace rato, tuvimos reuniones con el municipio pero nunca se tomaron medidas que nos garantice la seguridad en el trabajo", abundó.
El impacto de la medida se sintió en la ciudad, aunque por suerte no la dejó completamente incomunicada, ya que la restricción de la circulación fue parcial, y porque además la líneas 142, que también comunica a los villagalvenses, trabajó normalmente.
LaCapital recorrió el lugar y pudo hablar con choferes que detenían los colectivos en Filippini y San Diego. "Primero llegamos hasta aquí, pero después nos extendimos hasta el Cristo (Coronel Aguirre) porque tampoco podemos dejar a pata a tanta gente, hay muchas personas que vienen de trabajar", contó Ariel Felbau, un conductor que esperaba la indicación para continuar el recorrido hacia Rosario.
Desconcierto y bronca. Entre los pasajeros reinaba cierto desconcierto, no sólo por lo intempestivo de la medida, sino por los cambios que se iban sucediendo durante el día. "¿Sale ahora o hay que esperar?", preguntaron dos mujeres desde abajo del colectivo donde subió este diario. En la parada de San Diego, una joven embarazada que no se identificó, protestaba: "Yo estoy yendo al médico con dolores, ¿qué pasa si pierdo el bebé? ¿Quién me responde por eso?". Parecían que la hubieran escuchado, porque rápidamente pasó una unidad que levantó a los que esperaban. "Estamos pagando nosotros la culpa; nosotros tenemos que hacer doble gasto para llegar a casa EM_DASHnueve pesos el boletoEM_DASH, y estamos como siempre. Por lo menos, tendrían que hacernos un trasbordo que nos lleve hasta allá; así no se puede, a nueve pesos el boleto. Por la inseguridad, a mí me robaron hace poco, y estos por la inseguridad hacen lo que quieren", le había dicho horas antes Romina, una vecina de la ciudad, a periódico digital 12 Noticias.
La bronca de los usuarios del servicio de la 35/9 Verde se trasladó luego a las redes sociales. "Es una verdadera mierda, la culpa siempre la pagamos los trabajadores", dijo Paola en el Facebook del diario digital. A su vez, Paola, agregó enfurecida: "Llega hasta Filippini y San Diego, y vale 9 pesos igual. Esta mañana, de 7 a 8, estuve esperando. ¿Quién nos devuelve lo que nos descuentan por llegar tarde o no poder ir a trabajar. Una vergüenza".
Reunión clave. Mientras esto ocurría, el jefe de la Zona 5 de policía, Eduardo Zapata, le revelaba al periodista Arturo Mingolo (VGG Noticias) que ninguno de los hechos denunciados públicamente había sido asentado en sede policial, y anunciaba que hoy se propondría a los choferes un operativo de control en los recorridos de la línea.
Por su parte, Diego Garavano, titular del Concejo de Villa Gobernador Gálvez, detalló a LaCapital que "el reclamo es por más seguridad, los colectivos de bandera Verde no llegan al cementerio local, pero sí entran a la ciudad", y recordó: "Hace unos 15 días mantuvimos una reunión en donde nos plantearon problemas por robos e inseguridad en la zona y la policía dispuso reforzar la custodia en las horas pico en donde se había registrado delitos. Sin embargo, volvieron a ocurrir hechos de asaltos y ahora los choferes tomaron esa decisión".
Asimismo, Garavano precisó que "para mañana (por hoy), desde las 8, se convocó a una reunión entre la Municipalidad, el área de Seguridad de la provincia, los choferes y la empresa de la 35/9 (Rosario Bus) para congeniar soluciones al conflicto, derivado por la inseguridad que padecen conductores y pasajeros en las unidades de transporte".