Las autoridades griegas pidieron la ayuda de Interpol para identificar a María, la niña rubia de ojos verdes, encontrada el miércoles 16 en un campamento de gitanos en Farsala (centro de Grecia), anunció la organización de cooperación policíaca. La policía, además, ahora está investigando una decena de casos de niños desaparecidos que podrían ser similares al caso de María.
La policía internacional está colaborando con las autoridades griegas para ubicar a través de análisis de ADN a los familiares reales de la niña, confirmó en Cartagena (Colombia) ayer a la agencia AFP el secretario general de la organización, Ronald Noble, que participa en la 82 asamblea de Interpol en la ciudad colombiana de Cartagena.
La justicia griega inculpó el lunes por "secuestro" a una pareja de gitanos que se hacían pasar por los padres de la niña. La decisión judicial fue tomada tras la oleada de indignación que provocó el descubrimiento por la policía de esta misteriosa niña rubia de ojos verdes que vivía con la pareja inculpada. Tras realizar pruebas de ADN quedó demostrado que no tenían parentesco alguno con la pequeña.
El anuncio de la decisión judicial se produjo después de que el hombre, de 39 años, y la mujer, de 40, declararan ante un juez de instrucción del tribunal correccional de Larissa (centro de Grecia), indicó el abogado.
El hombre que se hacía pasar por el padre de la niña afirmó que la madre y el padre biológico de la menor, un gitano búlgaro, les entregaron a la pequeña cuando acababa de nacer, según la agencia de noticias griega ANA.
"Hay una decena de casos de desapariciones de niños originarios de países como Estados Unidos, Suecia, Polonia y Francia, que son objeto de investigaciones más profundas", declaró a AFP Panagiotis Pardalis, portavoz de la asociación "La sonrisa del niño".
La difusión de la foto de la niña por la policía provocó miles de llamadas telefónicos y de mensajes electrónicos de parientes o de allegados de niños desaparecidos, en Grecia y el extranjero.
La asociación "La sonrisa del niño", que recibió más de 8.000 llamadas el fin de semana pasado, los transmitió a la policía.
En un caso muy similar al ocurrido la semana pasada en Grecia, las autoridades irlandesas quitaron ayer la potestad a una familia de etnia gitana de su supuesta hija de 7 años, ante los temores desatados porque la pequeña, rubia y de ojos azules, no guarda parecido alguno con el resto de la familia.
Por el momento no hay acusaciones concretas de secuestro de la pequeña, informó la policía.
Sin embargo, las autoridades se la entregaron a los servicios sanitarios después de que los padres, que insisten en que la hija es suya, no pudieran probar su identidad.
Un pasaporte que tenían era muy viejo y el certificado de nacimiento que presentaron no convenció a la policía. Además, en el hospital de Dublín, en el que nació en 2006, no había información sobre ella.
La niña está en buen estado de salud y de momento no está previsto llevar a cabo pruebas de ADN, pero la Europol contrastan datos de casos de niños desaparecidos.
Por ahora no hay datos
"Lo que las autoridades griegas pidieron hacer a Interpol fue usar nuestros enlaces de ADN para que si alguien dice yo soy el hermano, el padre, la madre o la hermana (de la niña) se le pueda tomar a esa persona un perfil de ADN, enviarlo a Interpol y compararlo con el perfil que nos enviaron las autoridades griegas", explicó Ronald Noble. "En nuestra base de datos, no hubo ninguna coincidencia con el ADN de María que nos enviaron", declaró.