En Rosario unos 380 mil usuarios del servicio de gas podrían resultar beneficiados con descuentos de entre 30% y 50% en las tarifas si prospera el proyecto de ley de zonas frías, que busca bajar los costos en regiones del país que padecen bajas temperaturas, entre las que está incluida Santa Fe. Así lo confirmó el interventor del Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas), Federico Bernal, quien indicó que la iniciativa promovida por el oficialismo propone sumar al régimen a tres millones de usuarios y así beneficiar a 12 millones en Argentina, el cual “no implica subsidios ni costo fiscal adicionales, porque se autofinancia mediante un recargo en la factura de gas natural para todos los usuarios”, puntualizó. “La pesadilla tarifaria del macrismo, se terminó”, aseguró el funcionario.
—¿Cuáles son las características más relevantes del proyecto de ley de tarifas para zonas frías?
—El proyecto del Frente de Todos, Consenso Federal y Unidad y Equidad Federal presentado hace poco, propone sumar al régimen de zona fría unos tres millones de nuevos beneficiarios y beneficiarias. Estamos hablando de cuatro provincias nuevas: Córdoba, Santa Fe, San Luis y San Juan que se incorporan. De ese total, cerca de 2,6 millones que no reciben ningún beneficio recibirán facturas con descuentos del 30%, mientras que 50% de descuento aproximadamente unos 400.000, a lo que debe sumarse para este último grupo lo que ya perciben por tarifa social. El régimen de zona fría pasará de unos 780.000 actuales beneficiarios a prácticamente 4 millones, unas 12 millones de personas. Es decir, un 30% de la población resultará beneficiada por este proyecto.
—¿Cómo está pensado el esquema de financiamiento? ¿Implica un nuevo esquema de subsidios?
—No implica subsidios ni costo fiscal adicionales, porque el régimen de zona fría se autofinancia. Existe un fondo fiduciario creado en el marco de la ley nacional 25.565 de 2002, que se solventa mediante un recargo en la factura de gas natural para todos los usuarios, aplicado sobre el precio de venta del gas en PIST. El proyecto de ley al ampliar el beneficio, lo que propone es aumentar ese recargo.
—¿A qué zonas beneficiará? ¿Está incluida Santa Fe?
—Santa Fe se incorpora a partir de este proyecto. Aproximadamente se beneficiarán unos 500.000 nuevos santafesinos y santafesinas de los departamentos de Belgrano, Caseros, Constitución, General López, Iriondo, Rosario, San Lorenzo y San Martín. Sólo de Rosario se suman 380.000 beneficiarios.
—¿Cuáles son todas las áreas geográficas beneficiadas?
—El proyecto original que presentó el diputado Máximo Kirchner, extiende el régimen de zona fría a 3 millones de usuarios y usuarias que no contaban con ningún descuento. Hoy lo tienen las zonas bioclimáticas que involucran Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, Santa Cruz, Chubut, Río Negro, Neuquén y La Pampa (marginalmente Buenos Aires). A esto hay que agregar el corredor cordillerano de La Puna y la ciudad de Malargüe, en Mendoza. Con esta ampliación, se incluyen cuatro provincias: Córdoba, Santa Fe, San Luis y San Juan. Buenos Aires pasa de 11.000 beneficiarios a 1,2 millones; Mendoza de unos 6.000 a unos 400.000. En Córdoba, 650.000 beneficiarios nuevos y 500.000 en Santa Fe.
—¿Cómo impactará en las facturas?
—El impacto en las facturas será muy marginal, especialmente para los casi 4 millones de usuarios y usuarias beneficiadas y que percibirán descuentos del 30% al 50%. Esto es así porque el recargo, de acuerdo al proyecto original, que no superará el 6%, se aplica sobre el precio del gas que es uno de los cuatro componentes de la tarifa. Si la ampliación queda en 3 millones de nuevos beneficiarios y beneficiarias, el aumento en una factura residencial de una zona templada rondará los 5 pesos. Si, por ejemplo, al proyecto se le suman más localidades y provincias, ese aumento podría rondar los 6 a 8 pesos para ese mismo usuario. Por eso, más allá de las modificaciones, el impacto es exiguo.
—En este contexto de pandemia ¿Cómo lograr que Argentina tenga “tarifas justas, razonables y asequibles”?
—Contexto de pandemia o no, para lograr tarifas justas, razonables y asequibles lo que hay que hacer es dar efectivo cumplimiento a los derechos y garantías reconocidos en los artículos 14 bis, 41, 42, 43 y 75 (incisos 22 y 23) de la Constitución Nacional, así como cumplir con el marco regulatorio de la industria del gas (ley 24.076). La gestión de Macri violó el marco regulatorio e incumplió con los derechos y garantías reconocidos en los artículos citados. De esta forma, el servicio público de gas por redes se convirtió en un bien de lujo, en un negocio de unos pocos en detrimento de los casi 9 millones de usuarios y usuarias del servicio público. Con la Constitución en la mano, con el fallo de la Corte Suprema de 2016 y los Tratados Internacionales de Derechos Humanos de jerarquía constitucional, estamos recuperando el servicio público de gas por redes como derecho social y garantía de derechos humanos.
—¿Cómo sigue la actualización de las tarifas de gas para los usuarios residenciales en este 2021?
—En breve tendremos vigentes los cuadros tarifarios de transición. Es todo lo que puedo decir. Lo más importante, no obstante, es que la pesadilla tarifaria del macrismo se terminó. El presidente Alberto Fernández nos pidió tener tarifas justas, razonables y que se puedan pagar, que contribuyan al desarrollo productivo y la equidad distributiva. Con esta instrucción trabajamos todos los días.