El proyecto de ley de blanqueo que impulsa el Ministerio de Economía prevé quienes exterioricen activos no declarados en el exterior paguen una alícuota del 2,5% desde la entrada en vigencia del régimen hasta el 31 de marzo. Luego, ese porcentaje subirá al 5% y al 7,5% en los posteriores trimestres.
El proyecto de “Declaración voluntaria del ahorro argentino no exteriorizado” establece que funcionarios nacionales y sus familiares no podrán acceder a este blanqueo, así como tampoco quienes hayan sido alcanzados por el aporte solidario dispuesto para morigerar los efectos de la pandemia.
Según el proyecto, los sujetos alcanzados serán las personas humanas, sucesiones indivisas y empresas.
Los bienes comprendidos serán la tenencia de moneda nacional y/o extranjera en el país y/o en el exterior, activos financieros, bienes inmuebles, bienes muebles y demás bienes en el país y/o en el exterior, incluyendo créditos.
Asimismo, se duplican las alícuotas para los bienes del exterior cuando no exista repatriación. También se establece un régimen simplificado con una alícuota especial del 1,5% aplicable a personas humanas que exterioricen tenencia de moneda nacional y/o extranjera y el monto no supere el 35% de los ingresos anuales promedio de los últimos tres períodos fiscales y con un tope de hasta u$s 50.000.
A diferencia de lo sucedido con el blanqueo impulsado por Macri habrá exclusiones para funcionarios públicos y familiares directos. En concreto, no podrán ingresar los sujetos que entre el 1º de enero de 2010 y la vigencia de la presente ley hubieran desempeñado funciones públicas así como sus cónyuges, convivientes, padres e hijos.
También se incorpora la figura del colaborador para que la Afip obtenga información.