"La gente nos dice que este es el mejor espectáculo de Midachi que vio en su
vida", coinciden Dady Brieva, Miguel Del Sel y el Chino Volpato. Y no hay motivos para no creerles.
El trío humorístico más famoso de la Argentina vuelve a Rosario con "Midachi De Película", en una
saga de, por ahora, cinco funciones que se iniciará este viernes, sábado y domingo y continuará la
semana próxima en el teatro Broadway.
Como hace 25 años en su querida Santa Fe, los Midachi volverán a estar en escena
los tres solos. Habrá una pantalla, efectos multimedia, una producción logradísima, pero, en
esencia, estarán las tres humanidades arriba del escenario. Sin bailarinas, sin músicos
acompañantes, sin nada más que Dady, Miguel y el Chino. Con todo lo que eso representa.
"Nos dimos cuenta que la gente garpa para ver cómo nos reímos", dice Dady, y
agrega: "Es que en el humor no se puede mentir mucho. A veces nos dicen que somos como Los
Chalchaleros o Soda Stereo, que siempre estamos volviendo, pero nosotros jugamos arriba del
escenario y la gente viene a ver eso".
Dady, quien aseguró que rechazó numerosas propuestas teatrales, de comedias
musicales y de revistas a lo largo de su carrera, fue contundente al manifestar que: "No me subiré
al escenario con otra gente que no sea con Midachi. Con ellos es con quiénes mejor me siento.
Aparte, en Buenos Aires, estamos segundos en recaudación después del fenómeno de "Casi Angeles", lo
que habla de una elección de la gente que se mantiene a lo largo de 25 años".
Rosario no es ajeno a la historia de Midachi. Parafraseando a Fito, "siempre
estuvo cerca". "A mí me gustaba cuando éramos más animales, más gitanos, que no nos importaba nada
de nada, cuando íbamos a la Lavardén, a Luna, a Lennon, a La Comedia, ¿ése de Mitre y la cortada
Ricardone, no?", rememora Dady.
"Eramos más marginales, pero, ojo, aunque ahora no tomo ginebra sino champán y
tengo caballos de carrera, y los tres estamos hechos económicamente, sigo teniendo contacto con el
mundo que me nutre, ésa es mi esencia y la de los tres", destacó el humorista.
Del Sel habla con algo más de seriedad que el desparpajo habitual con el que se
lo ve en el escenario o en la tele. Aunque se despacha con perlitas de las suyas, que bien podría
decir alguna de sus criaturas. "Cuando actuamos es como un partido de fútbol con toda la hinchada a
favor, y la gente que nos va a ver es el pueblo, es gente de barrio, como nosotros", asegura.
El humorista sostiene que las palabras subidas de tono está lejos de constituir
una actitud osada. "Nuestras palabras fuertes son pocas y medidas, nunca provocamos el rechazo de
la gente. Además, si analizás la televisión de hoy, ves las minas en pelotas de Tinelli que se
pasean por todos los programas, y otros putean a cualquier hora, y nosotros no hacemos eso",
indica.
Del Sel dio una opinión sorprendente de su personaje fetiche, La Tota: "La traté
de dar de baja porque estoy repodrido de La Tota". Y agregó: "Pero me la piden de Susana, la otra
vez me felicitó Gustavo Yankelevich, de Telefé, y la gente me la pide. Yo trato de hacerla lo más
ácida posible para que me divierta".
El Chino Volpato destacó que "la gente sale muy conforme" y afirmó —al
igual que sus compañeros— que "todos coinciden en que este es el mejor espectáculo del trío.
Las risas son parejas durante todo el show", remató.
"Siempre fuimos un resorte para la gente. En un país con tantas problemáticas
sociales, vienen con la voluntad de reírse y llenan el teatro porque —remató— saben que
se van a reír con un espectáculo bien producido".