Así como el cine logró plasmar una narrativa sobre sí mismo, a veces nostálgica y otras irónica, con “Cinema Padiso”, “Ocho y medio” o “La noche americana”, los directores Leandro Koch y Paloma Schachmann hicieron algo semejante, pero con la música en “Adentro mío estoy bailando”. El film, que llegó esta semana a un grupo limitado de salas del país, entre ellas el cine El Cairo, fue estrenado en la sección Encounters de la pasada Berlinale donde ganó el premio a la Mejor Opera Prima y fue elegida Mejor Película en la Competencia Argentina del último Festival de Mar del Plata. El rodaje se realizó en Argentina, Austria, Ucrania, Rumania y Moldavia y contó con la colaboración de distintos músicos locales como el dúo Lerner-Moguilevsky y la banda Segundo Mundo, además de artistas que los directores entrevistaron a lo largo de un camino que comienza con el título “The Klezmer Project”.