La tarjeta plastificada con el nombre y la foto de su dueño es la llave que abre la posibilidad de estudiar, trabajar, sacar un crédito, acceder a un plan social o votar. La documentación es el trámite más demandado entre los vecinos que se acercan hasta el llamado "operativo multiagencial" que la provincia sostiene desde hace cuatro semanas en el barrio Ludueña. Una iniciativa que busca acercar al barrio gran parte de los servicios y programas de los que dispone el Estado santafesino y, al mismo tiempo, relevar las necesidades de los vecinos.
Sobre esas dos patas se asienta la estrategia que provincia y municipio pusieron en marcha para bajar los niveles de violencia en un barrio donde los vecinos conviven con extorsiones, balaceras y homicidios por las disputas entre bandas. "No corremos atrás de las balaceras, queremos mostrar que el Estado está presente y recuperar la confianza del barrio", señala el secretario de Políticas de Inclusión y Desarrollo Territorial del Ministerio de Desarrollo Social de la provincia, Fernando Mazziotta, y reconoce que la tarea es urgente: "competimos minuto a minuto con los narcos", dice.
Ludueña es casi una ciudad dentro de Rosario. Unas 50 mil personas habitan el barrio partido en dos por las vías del ferrocarril. Hay casas de dos plantas con balcones con flores, construcciones de viviendas sociales y asentamientos irregulares pobrísimos. Todo junto y en el mismo espacio.
Es, también, uno de los barrios del distrito noroeste que frecuentemente es noticia en las secciones que los medios de comunicación dedican a los sucesos policiales. De acuerdo a un informe del Ministerio de Desarrollo Social de la provincia, el 27 % de los homicidios registrados en el departamento Rosario en los primeros seis meses del año ocurrió en el noroeste. Siete de cada diez homicidios tuvieron como víctimas a jóvenes de entre 16 y 35 años de edad, la misma franja en la que se encuentran el 67 % de los heridos de bala.
Una semana antes de que terminara el mes de agosto, en Ludueña se realizaron 57 allanamientos en el marco de investigaciones por balaceras, homicidios y tráfico de drogas. Al final del día fueron detenidas 22 personas. Parte de los operativos se hicieron siguiendo los pasos de una banda comandada desde la cárcel que reclutaba menores ofreciéndoles botines o pelotas de fútbol, según describió el fiscal a cargo de las actuaciones, Pablo Socca.
Siete días después de todo eso, en la esquina de Solís y Casilda desembarcó un operativo del que participan programas de doce ministerios de la provincia, del municipio y de las dos empresas de servicios públicos. Todas las mañanas, de 8 a 13.30, de lunes a viernes bajo una serie de gazebos se ofrece la posibilidad de que los vecinos tramiten su DNI, se vacunen, se hagan test de covid o de VIH, se inscriban en cursos de formación o tramiten el boleto educativo gratuito, entre otras cosas.
Y una veintena de operadores de Desarrollo Social, Salud y de la Agencia de Prevención del Consumo de Drogas (Aprecod) recorren las calles del barrio, casa por casa, relevando las necesidades de los vecinos; sobre todo de los más jóvenes y de los que dejaron la escuela después de dos años de pandemia.
Una plaza sin césped
La semana pasada, los gazebos con el logo del gobierno provincial se instalaron en la plaza Pocho Lepratti, uno de los pocos espacios verdes de Ludueña. Casi una manzana con árboles frondosos, juegos para niños y un pequeño anfiteatro. Es una plaza sin césped, donde desde hace 20 años cada 27 de febrero se celebra el Carnaval Cumple de Pocho, un festejo multitudinario que organizan las agrupaciones sociales del barrio en homenaje al militante social asesinado en diciembre de 2001. El recuerdo del entrerriano, de pelo largo y rubio, que llegó en los 90 a vivir a Ludueña está presente también en un enorme mural pintado en los paredones de la escuela José Mármol, frente a la plaza.
En esa misma esquina de Vélez Sársfield y Larrea, y por esos turbulentos días, tres mujeres fundaron una feria del trueque que, con el correr de los años y las sucesivas crisis económicas, se convirtió en una de las ferias populares más grandes de la cuidad. El lugar, donde se compra y vende desde ropa hasta alimentos, actualmente representa la principal fuente de ingreso de unas 400 familias. El mercado funciona de miércoles a domingo y los fines de semana explota de gente. Pero los feriantes se retiran, puntualmente, a las seis de la tarde. Después de esa hora, advierten los vecinos, caminar por el barrio es riesgoso.
Desde esa plaza, todos los días, parte el equipo que en cada jornada se encarga de recorrer nueve manzanas del barrio, identificados con pecheras color azul. A Lara (21 años) y Brandon (23) les tocó relevar este miércoles parte de las siete manzanas comprendidas entre las calles Juan José Paso, Solís, La Salle y Roullión. Tienen las palmas de las manos coloradas de tanto aplaudir para llamar a los vecinos. "La mayoría de las casas tienen tantas rejas que los timbres quedan inaccesibles" comentan y confirman lo esperado: las cuestiones vinculadas con la seguridad son la principal queja de quienes viven en Ludueña. Tanto que algunos les preguntan cómo andan solos por la calle, tanto que una mujer pide que saquen el árbol de la esquina para que "una bandita" no tenga donde juntarse.
En cada casa se escuchan situaciones donde las balas picaron cerca. "Al vecino de la otra cuadra, un albañil, lo mataron de un tiro. A mi me robaron con una pistola en la puerta de mi casa", relata de corrido una mujer y se queja de su realidad. "Rosario era una ciudad hermosísima. Es una lástima", concluye.
Caso por caso
Desde el 29 de agosto pasado, en el operativo de barrio Ludueña se atienden unas 400 personas por día. En el puesto móvil del Registro Civil se realizan ciento treinta trámites diarios entre documento, partida de nacimiento, y en menor cantidad, pasaporte. Salud atiende ciento cuarenta personas por día, la mayoría se coloca vacunas. Diariamente unas 30 personas se atienden por temáticas sociales.
Según cifras oficiales, en los primeros 16 días hábiles del operativo se confeccionaron 1.140 documentos de identidad, se colocaron 600 vacunas Covid y 750 vacunas del calendario obligatorio, se realizaron 42 consultas de consejería en fonoaudiología, 36 en nutrición y se hicieron 45 test VIH, por sólo citar algunos números.
"Que estén todas las áreas de gobierno juntas nos permite atender en forma adecuada todos los casos", señala Camila Bettanin, sub secretaria de Aprecod, y Mariana Recalde, sub secretaria de inclusión socio productiva, remarca que más allá de las intervenciones concretas, "el principal objetivo es relevar el barrio". Ambas ponen como ejemplo a Juan, el adolescente que llegó sin documentos y en los próximos días empezará un curso de capacitación laboral. "Sólo esa historia, justifica todo esto", afirman.
Obras para el barrio
El operativo se complementa con una serie de obras para mejorar los espacios públicos del barrio.
El pasado 30 de agosto, el gobernador Omar Perotti y el intendente Pablo Javkin firmaron un convenio para poner en marcha el proyecto “Incluir Ludueña” que contempla la realización de obras viales, aperturas de calles, e intervenciones en diferentes espacios públicos del barrio.
La iniciativa tiene una financiación de 726 millones de pesos que serán destinados a distintos proyectos para mejorar la infraestructura y servicios en el barrio con el objetivo de contribuir a crear entornos más agradables y seguros.