Fue un partido histórico, por la eliminación de Alemania en la primera ronda y porque es la primera vez que una mujer arbitra un juego en un Mundial de fútbol masculino.
Fue un partido histórico, por la eliminación de Alemania en la primera ronda y porque es la primera vez que una mujer arbitra un juego en un Mundial de fútbol masculino.
Ella es la francesa Stéphanie Frappart, de 38 años, con amplia experiencia en el arbitraje tanto femenino como masculino.
Frappart estuvo acompañada de dos asistentas, la brasileña Neuza Back y la mexicana Karen Díaz Medina. Una terna arbitral femenina justo en un país donde los derechos de las mujeres no son reconocidos. Todo un símbolo en pleno Mundial.
La jueza se lució con un arbitraje firme y decidido. No fue fácil el desafío al que se enfrentó, ya que se definía la clasificación del grupo E, quedando Alemania afuera del Mundial, a pesar de haber ganado. Una autentica decepción para una de las grandes potencias.
Frappart mide 1,64 metro, lo que la dejó un par de cabezas por debajo de los jugadores alemanes y de algunos costarricense. Sin embargo, nada la amedrentó y se movió ágilmente por toda la cancha, siguiendo las jugadas con precisión.
De gestos claros y definidos, no entró en discusión. Peinada con un rodete y el cabello tirante para atrás, nada la distrajo de su misión principal en un partido lleno de sorpresas.
Hubo un momento de tensión cuando un futbolista de Alemania y otro de Costa Rica discutieron y la mujer los detuvo inmediatamente con gestos severos.
Alemania ganó por 4 a 2 pero se fue del Mundial por diferencia de goles. Una verdadera sorpresa en un partido que pasó a la historia por el arbitraje de Frappart.
Stéphanie Frappart nació en el Valle del Oise, en Francia, donde jugó al fútbol. Luego se inclinó por el arbitraje y desde los 20 años es jueza en las grandes ligas.
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Un peso pesado afuera
El cuatro veces campeón del mundo quedó fuera del campeonato en la primera ronda, como ya le sucedió hace cuatro años, en el Mundial de Rusia. El seleccionado europeo protagonizó un nuevo fracaso pese a la victoria sobre Costa Rica por 4-2, ya que fue superado por España en diferencia de gol en el grupo E de Qatar 2022. Kai Havertz, Serge Gnabry y Niclas Fullkrug marcaron los goles teutones.