Si bien la falta de certezas a futuro sigue marcando el pulso de la pandemia de Covid-19, el presente que desanda la provincia le permitió al gobernador Omar Perotti flexibilizar su cuarentena: activó el diálogo, en persona y a través de sus espadas, con propios y referentes opositores con el objetivo de fortalecer su gestión y el respectivo vínculo con la Legislatura santafesina. El escenario electoral 2021, también inmerso en dudas por una crisis sanitaria con final abierto, se coló en las conversaciones, al igual que el plan de rescate del grupo Vicentin que impulsa el rafaelino.
Seis de los siete diputados provinciales que conforman la bancada oficialista confluyeron el miércoles a la noche a la residencia del mandatario provincial, emplazada a escasos metros de la Casa Gris. Se trata de Leandro Busatto, Luis Rubeo, Matilde Bruera, Paola Bravo, Lucila De Ponti y Ricardo Olivera. Oscar Cachi Martínez estuvo ausente.
La cena había sido convocada por Perotti, quien recibió a los legisladores junto a Esteban Borgonovo (ministro de Gobierno), Alejandro Bento (nominado a un eventual triunvirato interventor de Vicentin) y Miguel Altamirano (secretario de Comunicación).
El encuentro con los diputados, que concluyó en las primeras horas de ayer y se ajustó a la medidas de distanciamiento impuestas por la pandemia, buscó aceitar los mecanismos que permitan potenciar políticamente la administración justicialista en una Cámara baja con supremacía del opositor Frente Progresista (FPCyS).
Los diputados del PJ, en tanto, propiciaron un acercamiento de posiciones con los senadores provinciales del mismo sello. En la Cámara alta el oficialismo es mayoría, pero no siempre hubo sintonía con las pretensiones del Ejecutivo. Pese a que ya hubo acuerdo con los legisladores que, al despuntar el mandato de Perotti, exteriorizaron su rebeldía, es clave consolidar el frente interno en el peronismo.
Otro planteo de los diputados, que también cosecho la aprobación de Perotti, es aumentar el ida y vuelta entre los legisladores oficialistas y las distintas dependencias de la Casa Gris en pos del fortalecimiento de la gestión.
Nadie duda de que Santa Fe acusará recibo de un crítico combo: la crisis que marcó a fuego el final de 2019 y el inicio de 2020 y el todavía impredecible impacto sanitario, social y económico de la pandemia. Actores que condicionan el futuro político y electoral (a un año de los comicios de medio mandato) del oficialismo.
El salvataje de Vicentin —en concurso de acreedores— propiciado por el gobernador, que consiste en una intervención tripartita que permita eludir la expropiación fogoneada días atrás por la Casa Rosada, también fue abordado por los comensales. Por lo pronto, Perotti se comprometió a recibir a la comisión de seguimiento de la situación del gigante cerealero (doce diputados de distintas bancadas).
Lo propio ocurrió con el proyecto de adhesión a la ley nacional de riesgos del trabajo (ART), que el Senado provincial le acaba de dar media sanción (tras introducirle cambios), y con la iniciativa que contiene la nueva normativa de seguridad pública que, según admitió Perotti, consumirá el tiempo que haga falta para alumbrar una aprobación consensuada en Diputados.
Segundo cónclave
"Fue una muy buena charla, distendida", deslizó a La Capital uno de los invitados a la cena en la residencia oficial, a modo de balance. Pero, casi a la misma hora, el restaurante del Hotel España, ubicado en el centro de la capital provincial, también recibió a integrantes del círculo íntimo del gobernador y a un par de dirigentes del macrismo y el radicalismo.
En este caso, los comensales fueron el senador nacional Roberto Mirabella; los diputados provincial y nacional de Juntos por el Cambio (JxC) Julián Galdeano y Federico Angellini, respectivamente, y Luis Pfeiffer, histórico ladero de Perotti y director de 5RTV (canal público santafesino).
La agenda de temas abordados entre bocado y bocado incluyó la decisión de mejorar la interacción entre la Casa Gris y el arco opositor, la evolución de la pandemia en la provincia, los problemas financieros por los que atraviesan municipios y comunas, la suerte a correr por Vicentin y el escenario electoral del año próximo (¿con o sin primarias?).
Tanto Angelini como Galdeano pusieron sus espacios políticos a disposición de Perotti. "Lo que viene será muy complicado y no hay margen para ampliar la grieta en Santa Fe", comentó a este diario un voz opositora.
En un contexto más formal, la semana próxima tendrá lugar una cumbre entre la administración provincial y el Frente Progresista. En rigor, la reunión estaba prevista para el martes pasado pero, por superposición de agendas, fue postergada siete días.
Se trata del demorado encuentro cercano entre Perotti y su antecesor, Miguel Lifschitz, protagonistas de una tensa relación desde el cambio de mando en Santa Fe, ocurrido el 11 de diciembre.
Cronograma
El gobernador Omar Perotti replicó ayer las críticas que recibió el cronograma extendido de pago de sueldos a estatales. “Nos encantaría poder pagar todo junto, como seguramente a muchos de los trabajadores del sector privado les gustaría tener trabajo, no haberlo perdido, poder cobrarlo entero”, aseguró.