El presidente Mauricio Macri recorrió esta mañana zonas inundadas del sur de Tucumán, que afectaron a miles de personas, en compañía del ministro del Interior, Rogelio Frigerio, quien habló de "desidia" y "falta de control del Estado" como causantes del desastre.
Frigerio, en declaraciones a medios locales, advirtió que "no sólo acá (en Tucumán) hay problemas, sino también en la mitad de la Argentina" y sostuvo que "el calentamiento global hace que esto sea más recurrente y dramático, pero todo esto es una suma de la desidia y la falta de control del Estado".
De esa forma, el funcionario abordó la polémica entre la Nación y el peronismo local por la supuesta falta de obras, que habría originado las inundaciones tras las lluvias.
Asimismo, enfatizó que "hay que cambiar, eso es lo que está proponiendo el Presidente, y aquí también hay que hacerlo", luego de mencionar que los vecinos "nos dijeron que no se habían hecho el mantenimiento de los canales, que estaban sucios".
"Cada uno debe hacerse cargo de su responsabilidad. Se sabía que iban a venir", prosiguió el titular de Interior, en declaraciones que parecieron dirigidas tanto al anterior gobernante local, el peronista José Alperovich, como a su sucesor, Juan Manzur, quien formó parte de la recorrida.
Frigerio aseguró que se enviará ayuda a Tucumán, porque "no miramos las camisetas de los gobiernos circunstanciales de cada lugar" y "las ayudas no van a los gobernantes, sino a la gente que las necesita".
Macri hizo una escala en la localidad santiagueña de Termas de Río Hondo, también anegada, y luego sobrevoló Lamadrid y se dirigió a Monteagudo, donde el mandatario se reunió con docentes y funcionarios provinciales.
Frigerio, en tanto, dijo que los pobladores afectados "deben saber que va a haber un Estado que va a prever que esto no vuelva a ocurrir; estamos conteniendo a los evacuados, está llegando la ayuda de la Nacion", y aseguró que el gobierno está "trabajando con funcionarios de la provincia".
"La etapa de la reconstrucción es difícil y lleva su tiempo, que va desde las redes de servicios públicos como luz y agua hasta las casas, el pavimento y las escuelas. Hay que esperar que se retire el agua y ahí se podrá hacer un diagnóstico. No tenemos un presupuesto, sólo una previsión", agregó.
Trascendió que Manzur solicitó un aporte extraordinario del Tesoro Nacional por 600 millones de pesos, a lo que Frigerio aclaró que está "analizándolo".
La semana pasada, cerca de cinco mil personas tuvieron que abandonar Lamadrid y otras localidades, por las inundaciones.