Un futbolista rosarino de 27 años que juega en la Liga Totorense quedó detenido este domingo a la tarde cuando estaba a punto de empezar un partido en la localidad de San Genero. ¿El motivo? Según el sistema Tribuna Segura, el jugador tenía un pedido de captura por el crimen de un cartonero ocurrido en noviembre de 2020 en el barrio Empalme Graneros en Rosario.
El singular hecho sucedió ayer, alrededor de las 14.30, cuando se estaba por disputar el partido de fútbol entre los clubes Atlético San Genero (el local) y Alba de Maciel. Mientras se realizaban los controles de rigor por medio del sistema Tribuna Segura se estableció que el jugador Jorge Manuel B., de 27 años, tenía un pedido de detención en su contra.
Según fuentes oficiales, Jorge B., quien tiene domicilio fijado en Rosario, era buscado por la Justicia por el homicidio agravado de Claudio Alejandro Román. La detención de Benítez fue a requerimiento del Ministerio Público de la Acusación de Rosario. El futbolista fue trasladado a la seccional 6ª de San Genaro a fin realizar diligencias de rigor y posterior quedó a disposición de la Fiscalía requirente.
Benítez estaba mencionado en la causa judicial en la que se investigó el crimen del cartonero Claudio Alejandro Román, ocurrido el 27 de noviembre de 2020, en barrio Empalme Granero de Rosario, pero nunca se lo pudo someter a proceso. Por ese asesinato ya fueron condenados a 14 años prisión Cristian Camilo Ghiraldo Ramírez, de nacionalidad colombiana, como autor material del crimen, y a dos años de prisión condicional a Damaris Daiana Benítez, pareja de Cristian por el delito de amenazas.
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Alejandro Román en una foto que Aylen, su compañera, lleva guardada en su celular. Lo mataron de dos balazos calibre 11.25.
Celina Mutti Lovera.
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Crimen en Empalme Graneros
Según se probó durante el proceso judicial, el hermano de la mujer, Jorge, habría sido quien llevó en moto a Ghiraldo Ramírez hasta la casa de Román, una acción que lo ubicaría como partícipe necesario del delito
Claudio Alejandro Román, de 40 años, fue asesinado a sangre fría en Olavarría al 1500 Bis, en la zona más humilde Empalme Graneros. De acuerdo lo que se pudo probar, la víctima había solicitado un préstamo a unos usureros de nacionalidad colombiana y el crimen se produjo cuando los delincuentes le fueron a recriminar el pago de una deuda. Román habría manifestado que no llegó a reunir en el dinero y entonces Ghirlaldo Ramírez y Benítez le balearon el frente de su humilde casa. Entonces Román los increpó por esa acción y en ese instante lo mataron a balazos.