Juan Manuel M., un comerciante de 37 años que vive en el barrio Luis Agote, mató de un balazo a una persona en un hecho que la Fiscalía investiga como un acto de legítima defensa. Una versión preliminar indica que la víctima fatal, que todavía no fue identificada, estaba armada y deambulaba con intenciones de robo por los techos linderos a la casa del autor de los disparos, que quedó en libertad. Los vecinos hablan de un sector del barrio que -con el paso de los años- se acostumbró a los arrebatos callejeros o a los robos de elementos en viviendas.
Cerca de las 5.30 de este lunes, un hombre de unos 30 años llegó a los tumbos al McDonalds de calle Santa Fe y Vera Mujica. Estaba herido con un balazo en el pecho y antes de desplomarse apenas alcanzó a balbucear un pedido de ayuda. Las personas que estaban en la zona llamaron al Sies pero los médicos poco pudieron hacer más que intentar reanimarlo de camino al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez, donde confirmaron su fallecimiento a las 6.30.
Después de que la víctima fuera trasladada al HECA, un vecino de San Lorenzo al 3200 se presentó ante la policía como autor de los disparos, puso a disposición su arma y contó que le había disparado a un hombre que caminaba por los techos de las casas aledañas con intención de robo y un revólver en la mano.
Así lo describió la Fiscalía en su versión preliminar: "Un vecino de la zona que dormía en habitación cercana a terraza donde se encontraba el sindicado con intenciones de robo se asoma luego de escuchar ruidos y es sorprendido por el sindicado, quien lo apunta con el arma de fuego. Ante esta situación el vecino realiza dos disparos de arma de fuego en respuesta a la situación de amenaza".
Legítima defensa
Según este relato, el ladrón logró bajar de los techos y así llegó hasta el McDonalds donde finalmente fue asistido. El autor de los disparos fue identificado como Juan Manuel M., de 37 años. Sus vecinos contaron a La Capital que el hombre es comerciante. La fiscal que investiga el hecho, Gisela Paolicelli de la unidad de Homicidios, consideró que M. había actuado en legítima defensa y ordenó que quedara en libertad luego de los procedimientos de rigor.
En declaraciones a la prensa, Paolicelli explicó que decidió dejar en libertad a M. porque "la circunstancia del hecho habilita la figura de la legítima defensa". En ese sentido, también destacó que el autor de los disparos se pusiera de inmediato a disposición de la Justicia y entregara su arma.
En su relato, el hombre describió que el ladrón llevaba un arma plateada, lo que coincidió con el revólver calibre 22 hallado en un techo de Vera Mujica al 600 por la brigada de Homicidios de la Agencia de Investigación Criminal. "Estamos ante un caso en los que el derecho tolera o permite este tipo de situaciones porque está en juego la vida de la persona", agregó la fiscal.
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"A mi criterio, entiendo que podemos corroborar lo que fue la declaración del vecino que efectúa el disparo que termina con la muerte de esta persona", aseguró Paolicelli, quien además confirmó que el hombre es usuario legítimo del arma que utilizó. Describió que hay registros de llamados al 911 que dan cuenta de vecinos alertando sobre la presencia de una persona en los techos de las casas de esa cuadra.
A su vez, la encargada de la investigación explicó que está confirmado que el ladrón caminó por los techos aunque no pudo establecerse por dónde había accedido. Lo que sí detectaron, por los rastros de manchas de sangre, es por dónde esta persona bajó una vez que recibió el disparo. "Sabemos que desciende porque un poste de luz está manchado con sangre, lo cual además indica que es cierto que estaba en las alturas", describió la fiscal.
Vecinos, alarmas comunitarias y robos
"Yo duermo con la cabeza cerca de la ventana, escuché los dos tiros y después el movimiento de dos motos y algunos gritos", contó una vecina de la cuadra. Se trata de una zona del barrio Luis Agote en la que funciona un sistema de alarmas comunitarias que los vecinos gestionaron en la vecinal Maradona hace unos años.
Según relataron varios vecinos, con el paso de los años en ese sector del barrio se acentuaron los casos de arrebatos callejeros o de robos de pertenencias a las viviendas. Son cuadras en las que hay muchos edificios con balcones bajos, donde habita gran parte de la población universitaria de las facultades de la zona y que a su vez son muy oscuras.
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"El otro día se treparon y le robaron la bicicleta del balcón a un muchacho", contó una vecina. "A un hombre para robarle le pegaron en la cabeza y lo lastimaron todo, estaba con su nene que tuvo que ver todo eso", agregó otro. También hablaron de una reciente de seguidilla de robos de medidores de gas.