Policiales: Personal de la División Homicidios de la Agencia de investigación Criminal detuvo este mediodía a una mujer de 24 años, identificada como A. G., quien se encontraba prófuga de la justicia tras haber participado del homicidio agravado de Diego Marino, durante un conflicto interpersonal.
Marino de 28 años fue ultimado tras una reyerta el 27 de julio del pasado año, en Camino Muerto y las vías del ferrocarril, en la vecina ciudad de Granadero Baigorria.
Hasta el momento y por el mismo hecho se encontraban detenidos tres hombres: C. Gómez, E. Gómez y J. González, y la investigación continuaba en procura de la detención de A. G., quien quedó en calidad de detenida incomunicada a disposición de la fiscalía de Homicidios Dolosos a cargo de Ademar Bianchini.
Diego Alberto Mariño estaba en la casa de su hermana en Eva Perón al 1900, un lugar conocido como "Camino Muerto" de Granadero Baigorria celebrando una serie de cumpleaños que se dieron en julio en su familia. Según sus allegados "todos habían tomado mucho". En un momento Diego tuvo una discusión con tres personas, una de ellas aparentemente su primo. Eso derivó en una pelea donde lo apuñalaron y murió. El fiscal Ademar Bianchini imputó a E. Gómez, de 22 años y apodado "Napio", y a C. Gómez, de 39 y conocido como "Ojito" como coautores de homicidio simple. En tanto a J. González, de 19, le atribuyó homicidio simple, violación de domicilio y amenazas coactivas calificadas por el uso de arma.
Según la evidencia reunida por fiscalía a partir de relatos de testigos, los tres atacantes "interceptaron a la víctima, quien se encontraba junto a su novia en la vía pública, y luego de perseguirlo y haber ingresado la víctima a una vivienda en busca de refugio, irrumpieron allí para agredirlo con diferentes elementos". En ese momento J. González le ocasionó una herida de arma blanca, lo que provocó el fallecimiento de Mariño.
Esa misma tarde la policía entrevistó a Ramón, de 63 años y padre de la víctima, quien contó que habían estado en ese cumpleaños en la casa de otra de sus hijas, hasta que en un momento su hijo le dijo que volvería a su casa, en barrio Nuevo Alberdi.
Luego contó que escuchó gritos que venían de afuera. "Un amigo de mi hijo me dijo que lo habían corrido y lo apuñalaron", sostuvo. Mariño había caído sobre las vías tras ser atacado en la calle. Fue perseguido por tres hombres, uno de los cuales era su primo, y una vez que lo acorralaron comenzaron a darle patadas y trompadas.
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En la pelea, situación que se supo en la audiencia imputativa, la víctima se había resguardado en una casa y de allí también huyó a las corridas; cuando lo alcanzaron uno de los agresores le clavó una cuchilla en el pecho a la altura del corazón. Alrededor de las 21 del mismo sábado la División Homicidios de la Policía de Investigaciones (PDI) detuvo a los ahora imputados.
Al enterarse de la salvaje agresión el padre, Ramón, lo llevó hasta el hospital "Eva Perón", pero Mariños llegó muerto. Pesquisas de Homicidios lograron dar con la pareja de la víctima, también de apellido Gómez, quien explicó que al salir de la segunda casa se les acercaron "Yoni, Rama y Ojito" y discutieron con Diego, quien salió a las corridas.
En la carrera la víctima tropezó y al caer al piso los otros tres comenzaron a golpearlo. "Después se sumó a la golpiza el apodado «Napio» y podría ser el que lo apuñaló", según dijo la testigo. El cuchillo no fue hallado.