Bajo una acusación por delitos que prevén prisión perpetua, una mujer fue imputada por el crimen de Yazmín Quinteros, de 30 años, quien fue asesinada a balazos en noviembre de 2023 en medio de una emboscada en Chubut y Ricardo Rojas, en el barrio Antártida Argentina. La víctima había llegado en el auto de un conocido desde Cañada de Gómez, donde residía tras cumplir una condena de 5 años y medio de prisión por varios robos, y al llegar a ese lugar donde había acordado un encuentro con conocidos la atacaron a tiros y escaparon en una moto.
La fiscal María de los Ángeles Granato imputó el viernes pasado a Romina Daniela A. como quien llegó al encuentro con Yazmín a las 16.30 del 29 de noviembre de ese año acompañada por otras personas y efectuó varios disparos que le causaron el fallecimiento. Luego, planteó la fiscal, escapó en una moto conducida por uno de sus acompañantes. La víctima falleció en el vehículo en el que había llegado, un Ford Focus gris donde la encontraron desplomada en el asiento del acompañante y con varias heridas de bala.
Dentro del auto
La mujer detenida por el caso fue imputada como autora de un homicidio calificado por ser cometido con el concurso premeditado de dos o más personas, por ser cometido con alevosía y por el uso de arma, además de la portación ilegal de un revólver calibre 22 empleado en el ataque. El juez Rodrigo Santana consideró formalizada la imputación y dictó la prisión preventiva de A. por el plazo legal de dos años.
Los vecinos del barrio Antártida Argentina contaron entonces a este diario que Yazmín llegó confiada al lugar donde la asesinaron en una especie de “batida” o entregada. Años antes había vivido en Viamonte al 7300, a unos tres kilómetros de donde la mataron, y llegó hasta el lugar como acompañante en un Focus que conducía Enrique Pedro T., un vecino de Cañada de Gómez. El chofer del auto contó que había llevado a Yazmín al encuentro con otra mujer que se paró al lado de la puerta derecha, discutió con la víctima y le disparó tres tiros.
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“La que llegó caminando desenfundó la pistola y le disparó”, contó un vecino. "Fue una entregada, una batida. Es mucho venirte desde Cañada de Gómez hasta acá, pleno Fonavi, y que te metan tres tiros porque sí. Es todo muy raro, fue premeditado", aventuró otro.
