Ocho meses después del asesinato del psicólogo Daniel Javier Santana, efectivos de la Policía de Investigaciones (PDI) detuvieron en el barrio Los Paraísos, de Villa Gobernador Gálvez, a un hombre de 40 años sindicado como el autor material del crimen ocurrido la noche del jueves 6 de abril pasado en un departamento de Moreno al 300. Su cuerpo tenía una veintena de puntazos, tres de ellos en el cuello, y numerosos golpes. El asesino de Santana cubrió su fuga incendiando el departamento y el cuerpo del psicólogo fue hallado calcinado tras el accionar de los bomberos. Tras la realización de la autopsia, la directora del Instituto Médico Legal (IML), Alicia Cadierno, sostuvo que según informes preliminares "existen elementos que obligan a pensar que la persona estaba con vida" al momento en que se declaró el fuego y que "inhaló monóxido de carbono en un estado de agonía".
El jueves 6 de abril, alrededor de las 19, los vecinos de Moreno 365 advirtieron que un incendio se había desatado en el departamento del primer piso B del edificio. Sin perder tiempo los habitantes de la propiedad alertaron a los Bomberos Zapadores y en poco minutos la dotación que arribó al lugar sofocó el fuego. Cuando los uniformados ingresaron al departamento hallaron a Santana tirado sobre la cama, sin vida y con el 80 por ciento de su cuerpo quemado. La autopsia después develaría las heridas cortopunzantes en su cuerpo.
Los vecinos de Santana contaron que el hombre vivía en el edificio desde hacia al menos tres años. Era psicólogo y que su departamento hacía las veces de consultorio. También trabajaba en una importante empresa de la localidad de María Juana.
"El hombre era gay y por como se lo veía era muy osado. A nadie le asombraría que haya hecho entrar a un desconocido al departamento y que esto sea consecuencia de su osadía. Hasta hace poco tiempo vivió con un compañero, pero ahora estaba sólo", describió un vecino del edificio que conocía pormenores de la vida de la víctima.
La investigación por la muerte del psicólogo recayó, en principio, en manos de la fiscal Valeria Piazza Iglesias, quien concurrió al departamento de calle Moreno y se topó con el cadáver de Santana. Entonces el fiscal de la Unidad de Homicidios Miguel Moreno tomó las riendas de la pesquisa de un crimen poco habitual. A partir de ese momento, el fiscal y su brigada operativa comenzaron a desplegar una verdadera obra de ingeniería investigativa que logró la detención del principal sospechoso en un expediente que parecía aletargado.
En la escena del crimen los agentes de la PDI secuestraron una computadora, el celular de la víctima, ropas del psicólogo y la totalidad de los cuchillos en el departamento. Si bien buena parte del lugar había sido consumido por las llamas, no se observaba desorden que hiciera imaginar que se había perpetrado un robo. La puerta de ingreso al departamento no había sido forzada y al llegar los bomberos estaba entreabierta.
Un celular y un video
Los pesquisas concentraron su trabajo sobre las cámaras de videovigilancia públicas y privadas que existen en las inmediaciones del departamento que habitaba el psicólogo y sobre su celular.
Primero lograron capturar el arribo al edificio de un individuo en moto utilizando un casco con algunas particularidades. Y sobre el celular trabajaron sobre las últimas conexiones de la víctimas por la red social WhatsApp. La última comunicación era con el agendado como "Miguel", quien utilizaba un teléfono con línea prepaga que tras el crimen dejó de funcionar. Tras ser peritado, el celular brindó información que permitió a los pesquisas dar con una identidad que fue cotejada con el perfil de Facebook de la víctima.
Así, la acumulación de evidencia colocó al sospechoso bajo la lupa de la sección Análisis Criminal de la PDI y sobre él comenzaron a realizarse tareas de inteligencia en la calle. Entonces dieron con Miguel Angel S., de 40 años y apodado "Tota", que tenía prontuario abierto y un antecedente condenatorio del juzgado de Instrucción 6ª de mediados de 2004 por homicidio y lesiones graves (ver aparte).
Bien temprano, ayer a la mañana, efectivos de la PDI llegaron hasta el barrio Los Paraísos de Villa Gobernador Gálvez y en la calle del mismo nombre, a la altura del 400, lograron detener al sospechoso que será imputado por el fiscal Moreno en las próximas horas por el homicidio de Santana. De la vivienda de "Tota" secuestraron una moto Motomel 150 centímetros cúbicos negra sin dominio, un casco negro con el número 22, dos celulares y diversas prendas de vestir.