Newell's alcanzó su única victoria fuera de Rosario en el torneo, ante Independiente Rivadavia, en Mendoza.
Newell's debe enterrar rápido sus traumas inmediatos y las series negras que acarrea en el Clausura, que lo depositaron en el fondo de la tabla de su zona, y lo llenaron de problemas. Durante todo este certamen no pudo instalar un punto de inflexión para recomponer y revitalizar su tránsito, y en el tramo de cierre luce atado y aturdido por las complicaciones que conlleva la lucha por la permanencia.
Más allá de que no tiene tiempo para nada, una de las mochilas más pesadas que arrastra es la floja campaña en condición de visitante, donde sufrió los golpazos más duros y dolorosos, que le dejaron heridas que todavía conspiran contra una reacción, que se dilata y profundiza las señales de alarma en el parque Independencia.
En el torneo, Newell's arrancó alcanzando un valioso triunfo en Mendoza, pero luego nunca más pudo conseguir una cosecha gruesa en una salida de Rosario. Un aspecto que debe ser analizado y tenido en cuenta.
De visitante, en el Clausura, jugó 7 partidos y sólo pudo colectar 5 puntos. Ese rendimiento representa un flaco 23,81 %, y lo ubica en el puesto 24º actuando en esa condición.
En esos 7 encuentros, únicamente pudo conseguir 1 victoria, 2 igualdades, y 4 tropiezos, con 4 goles a favor y 14 en contra. Recibió la misma cantidad de goles que Atlético Tucumán, el de peor rendimiento cuando juega fuera de su casa.
Poniendo la lupa sobre las actuaciones rojinegras de visitante, vale recordar que, en la 1ª fecha logró su único triunfo afuera, aquel 2 a 1 sobre Independiente Rivadavia, en Mendoza, goles de Cocoliso González y Ever Banega en el complemento.
Ese encuentro se desarrolló en el medio de la novela de salida que forzó el costarricense Keylor Navas, por la que tuvo que jugar Williams Barlasina de titular. Aquel marco entre bizarro y papelonezco, obligó a Newell's, que no había hecho viajar un tercer arquero, a usar al Pipa Benedetto, quien había viajado lesionado para acompañar a la delegación a ir al banco de relevos como guardameta.
Así, nació el torneo para el equipo rojinegro, todo intrincado, todo repleto de obstáculos, y en ese viaje a Mendoza formó de arranque con Barlasina; Jherson Mosquera, Luciano Lollo, Luca Sosa, Víctor Cuesta y Ángelo Martino; Luciano Herrera, Banega, David Sotelo y Gonzalo Maroni; y Cocoliso González.
En tanto, en la 3ª jornada, igualó 0 a 0 con Aldosivi en Mar del Plata, hoy un rival directo en la lucha por salvarse del descenso.
Luego, por la 5ª fecha, empató 1 a 1 con Defensa y Justicia, con gol de Mosquera en el primer tiempo, en Florencio Varela. A ese duelo, lo afrontó con suplentes, ya que guardó sus mejores armas para el clásico.
En el clásico comenzó a derrumbarse todo
La apuesta de Cristian Fabbiani, claramente no funcionó, porque en la 6ª jornada, perdió con Central 1 a 0 en el Gigante de Arroyito, con un gol de Ángel Di María de tiro libre, en el segundo tiempo. Ese fue uno de los grandes mazazos que recibió el conjunto leproso en este segundo semestre competitivo.
Por su parte, por la 9ª, perdió feo 3 a 0 ante Belgrano en Córdoba, luego de quedar eliminado por el mismo rival en la Copa Argentina. Esos fueron otros dos tremendos golpazos para un Newell's que se hundía cada vez más en su impotencia y en sus propios problemas.
Lo golearon en La Bombonera
Más adelante, por la 11ª, Boca lo vapuleó 5 a 0 en la Bombonera, en lo que fue la peor goleada que recibió y expuso una de sus peores caras en relación con su funcionamiento colectivo.
A pesar de los fuertes sopapos que recibía, ya que fue quedando lejos de todo lo que se había propuesto, el Ogro Fabbiani seguía sin renunciar, y la crisis se profundizaba a cada paso, en cada compromiso.
Ya en la 13ª, cayó derrotado por Argentinos por 3 a 1, con gol de Herrera. Esa presentación en La Paternal fue otra muestra muy contundente de una caída que no entraba piso.
Fabbiani no se quería ir
Más allá de eso, Fabbiani quería continuar al mando del plantel de primera división, pero esta vez, la dirigencia leprosa tomó la decisión de ponerle un punto final a un ciclo, que había culminado mucho antes, tras la derrota en el clásico y la eliminación de la Copa Argentina.
Ahora, teniendo en cuenta toda esa pesada carga previa, a Lucas Bernardi le tocará su primer enfrentamiento de visitante en esta recta final de 3 duelos.
El sábado debe medirse, con Huracán en Parque Patricios, otro exigente desafío para un Newell's que necesita, como nunca, y más que nuca, sumar unidades para sobrevivir.
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