Todo está como era entonces. Newell’s volvió al cúmulo de dudas que lo atormentaban, hasta que el inicio positivo, en cuanto a resultados, con Ricardo Lunari al frente del equipo, le dio una mínima tranquilidad. Los tres partidos sin victorias, con dos derrotas y un empate, lo devolvió a la cruda realidad.
Otra vez a empezar, con mayor presión, menos tiempo y con la complejidad de medirse contra el Huracán de Frank Kudelka, segundo en el torneo, este martes, a las 21, en el Coloso (TV TNT Sports).
La capacidad de maniobra se reduce. La liga se acorta y los ocho puntos que distancian a la Lepra de Independiente en la acumulada, último que ingresa a la Sudamericana, único objetivo en pie, con 21 por jugarse son considerables. Incluso está más cerca en los números que desde el juego. El 26º puesto que ocupa en esta liga entre los 28 clubes revela con mayor precisión la actualidad rojinegra.
Ricardo Lunari fue el piloto de tormenta designado por el club, con la enorme misión de rescatar al equipo del naufragio. No le dieron una tarea fácil. El plantel que tiene a disposición muestra limitaciones que lo condicionan. En la reciente caída con Unión, el entrenador, además, cometió errores en el armado del equipo, con una idea futbolística que resultó poco clara.
Newell's necesita temperamento
El temperamento, una vez más, como pasó en aquel comienzo de Lunari, vuelve a convertirse en un aspecto crucial para reponerse a este presente y compensar, si es que aparece poco o nada, la falta de fútbol.
Se necesita personalidad. Esa que es capaz de darle Rodrigo Fernández Cedrés, ausente contra Unión por la fecha de suspensión y seguramente de regreso frente al Globo. El carácter del uruguayo, la voz de mando que ejerce en el medio, no es poca cosa ante la confusión imperante.
Lo mismo que se encuentra en condiciones de brindar un futbolista de la trayectoria de Ever Banega, más que hablando haciéndose cargo de la generación, aunque se siga esperando mucho más. Entró unos pocos minutos frente al Tatengue, luego de la lesión, y el indicio es que será titular frente a Huracán. En definitiva, para “poner la cara” en este momento complejo, tal cual dijo Leonel Vangioni el último viernes.
Afuera Acuña y Panchito, que ni concentró
Los posibles elegidos, si es que se confirma el ingreso del Pibtull Fernández Cedrés y Banega, serían por dos que fallaron por completo en la visita a Unión: Valentino Acuña, “sacrificado” de volante central, y Francisco González, que casi no estaba jugando y da la sensación que le falta confianza y que ahora ni va al banco.
La restante modificación, que estaría en los planes, es la de Angelo Martino por Vangioni, otro “inmolado” en el estadio 15 de Abril, en la marca del promisorio lateral-volante Lautaro Vargas.
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Lo que resulta indispensable es un cambio colectivo de raíz. Es que Newell’s otorga demasiadas ventajas defensivas y le convierten con unas pocas aproximaciones. No se asocia y queda supeditado a intentos individuales para atacar. Y llegar al gol le resulta un problema enorme. Tiene apenas 13 en la Liga. Solo supera a Barracas, con 10.
Huracán puede ser líder
El Huracán de Frank Kudelka, aquel DT que llevó a Newell’s a clasificar a la Sudamericana 2021, lo visitará con la chance de alcanzar al líder Vélez, aunque sea de manera momentánea, en caso de ganar. Paradójicamente, siendo escolta llega de ser silbado por sus hinchas por el 0 a 0 con Gimnasia y sumar dos partidos sin triunfos, a lo que se agrega la eliminación en la semifinal de la Copa Argentina.
Kudelka cuenta con futbolistas conocidos para el fútbol rojinegro y rosarino, treintañeros ellos a excepción de Héctor Fértoli: el exNewell’s Federico Fattori y los exCentral Hernán Galíndez y Fernando Tobio. El Globo dispone también de un delantero de largo recorrido, Ramón Wanchope Abila.
No tiene sentido para Newell’s mirar más allá de Huracán y pensar en las próximas fechas, en cómo le puede ir. Para la Lepra el tiempo es hoy. Ganar es urgente.