Newell’s vuelve al Coloso, el escenario donde se siente más a gusto en el torneo, en procura de corregir un funcionamiento que muestra grietas y que le impidió ganar en los últimos tres partidos. Fernando Gamboa apelará al prestigio de dos referentes, Ignacio Scocco y Pablo Pérez, para que aporten el salto de calidad que hoy resulta imprescindible. El entrenador no los confirmó, pero se espera que ambos sean titulares esta tarde frente a Atlético Tucumán, conducido por un exDT leproso, Omar De Felippe. De paso llevará al banco a Julián Fernández, listo para ingresar en cualquier momento. El DT rojinegro necesita de ellos para levantar el juego del equipo.
El rendimiento de Newell’s se encuentra estancando y aparecieron las dudas. A los problemas defensivos de costumbre se le agregó que perdió variantes ofensivas, tanto en la generación como en la concreción. La actitud agresiva que ofrece es valorable, pero ya no resulta suficiente para ganar.
Gamboa se encuentra frente a la necesidad de realizar retoques. Tiene la ventaja de que volverá a contar con Pablo Pérez, después de una molestia que lo dejó afuera del partido contra Defensa y Justicia. El experimentado mediocampista es indispensable para regular los tiempos del equipo, una función que nadie más cumple. Con su regreso, retornará al banco Jerónimo Cacciabue.
Scocco también ingresará entre los titulares, aunque en su caso fue al banco ante Defensa y Justicia, ingresando en el segundo tiempo, por decisión del entrenador. El objetivo fue no exigirlo físicamente para preservarlo de una lesión. Hoy será incluido desde el inicio en lugar de Pablo Sabbag, que se perdió dos goles en Florencio Varela.
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Las situaciones desperdiciadas por Sabbag exponen la diferencia de jerarquía. Scocco sí la tiene. Esa cualidad es un valor en sí mismo, que puede darle un crecimiento a Newell’s. Como Pablo Pérez lo puede hacer con sus toques de distinción. Por condiciones, es indiscutible que no hay ninguno que los equipare. Hoy son futbolistas clave, determinantes, aunque después el desgaste físico propio de un partido les reste fuerzas y la incidencia de cada uno en el juego se vaya diluyendo.
Si Gamboa valora la posesión, con Pablo Pérez se aproxima a tener una distribución segura. Si el DT entiende que el control de la pelota tiene que redundar en un beneficio máximo, con Scocco crece la chance de que la pelota termine en gol. Nada está garantizado. Dependerá de que sean capaces de desplegar todo lo que saben. Y de que el equipo en su conjunto funcione, con la pelota y sin ella. Esto último es el gran déficit, en parte por la falta de contención en el medio. Por eso se valora tanto que vuelva Julián Fernández, hoy en el banco, tras el desgarro en el debut.
Newell’s, que tendría además la variante de Juan Garro por Justo Giani,se encontrará con un rival de andar irregular en el torneo. De la mano de De Felippe intenta ser intenso y con ataques directos. Le sale de a ratos. Y tiene urgencias, pero las mayores hoy corren por el lado de la lepra.
El regreso de Panchito González
La presencia de Francisco González entre los concentrados es una de las gratas novedades de Newell’s. El extremo izquierdo, que jugó los últimos cuatro partidos de la reserva, vuelve a estar en la primera luego de la rotura de ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda en diciembre de 2020.
Aparte de los titulares y de Panchito González, el resto de los 11 concentrados son: Williams Barlasina, José María Canale, Nicolás Capasso, Mariano Bíttolo, Patricio Acevedo, Fernando Belluschi, Juan Sforza, Julián Fernández, Justo Giani, Pablo Sabbag y Guillermo Balzi. El arquero Ramiro Macagno sigue sin ser convocado y tampoco atajará en reserva.
