Comparten los colores. Pero no es lo único. Newell’s se parece a Colón, su rival de esta noche, en la necesidad de sumar puntos para la tabla del promedio. Hasta allí las semejanzas. La diferencia radica en una cuestión que no es menor y que puede influir en el desarrollo del partido en el Coloso: la actualidad. El equipo de Frank Kudelka llega con un mejor ánimo porque no está tan apretado con respecto al descenso, se logró un funcionamiento colectivo y acumula un invicto de seis partidos. Por el contrario, el conjunto del ex DT leproso Diego Osella se encuentra más comprometido, en puesto de descenso, no levanta el nivel de juego y acumula siete presentaciones sin triunfos.
La complicación que le surgió a Newell’s en el día previo al partido fue la lesión de Aníbal Moreno. El atrevimiento del mediocampista para encarar o animarse a patear de lejos le habían dado al equipo otro volumen ofensivo. Por eso se lamenta su ausencia. Hasta ese hecho negativo, la semana había transcurrido con tranquilidad para la lepra, después del valioso punto en cancha de Lanús. Superar una prueba así, frente a uno de los conjuntos más parejos de la Superliga, fue otro empujón para mantenerse a distancia de los que están perdiendo la categoría. Hoy puede sacar una diferencia mayor, y de paso hundir al sabalero.
Newell’s le lleva 7 puntos a Colón en la tabla del promedio. Pero esa ventaja no se reduce a los números. La lepra encontró una regularidad en el juego que lo coloca por encima del sabalero. La seguidilla de partidos sin derrotas son una fortaleza anímica y futbolística del equipo de Kudelka.
En Colón, en cambio, hay cuestionamientos y dudas. Los resultados no se dan y las críticas siempre emergen en estos casos. La victoria es tan codiciada como esquiva en el sabalero. Lleva 7 partidos sin triunfos y el promedio decrece a niveles peligrosos. Además no gana de visitante desde mayo de 2018.
Newell’s anda mejor, aunque esto no implica necesariamente que no haya cuestiones a corregir. Sigue con problemas ofensivos. El año pasado estaba más derecho para el arco. Ocultaba mejor la dificultad de no encontrar un nueve que la meta. Lucas Albertengo, preservado el último partido más allá de que ingresó unos minutos, volvería a ser titular aunque ande torcido. Luis Leal, otro que no la emboca, le dejaría el puesto.
Pensando en Colón y en la prioridad de corregir la última puntada, Newell’s espera que Sebastián Palacios sea parte de la solución. En su primera partido de titular, contra Lanús, le dio mayores variantes al ataque, imprimiéndole vértigo y gambeta al equipo. Lo coronó señalando un gol.
Pero Newell’s no puede depender exclusivamente de Palacios. Tiene que encontrar otras opciones de ataque para que así crezca la chance de superar a Colón, que se espera tenga una postura más cautelosa en el Parque.
Este es un partido donde los puntos se cotizan mucho. Para Newell’s es una buena oportunidad de alcanzar un triunfo que lo siga sacando del grupo de abajo de la tabla del promedio.