Los cambios le funcionaron a medias al entrenador canalla
El Chacho hizo seis cambios, cuatro de ellos tácticos, y la puesta en escena le dio resultado en parte. Maquilló en parte las dudas en defensa y por momentos el equipo tuvo juego asociado, especialmente después de los ingresos de Lo Celso y Montoya. Muy buen aporte de Camacho.
17 de septiembre 2016 · 18:59hs
Los cambios y la puesta en escena que hizo
Central ante Patronato le funcionaron a medias al Chacho Coudet, que incluso debió cambiar sobre la marcha para encontrar el rumbo que le abrió el camino a la victoria.
La apuesta fue modificar en defensa para conseguir mayor seguridad en la última línea, pero modificó casi todo en la mitad de la cancha en procura de encontrar más volumen de juego, al punto que solo quedó Damián Musto de los cuatro nombres que estuvieron ante Vélez.
El ingreso de Menosse en lugar de Torsiglieri en el fondo y los de Colman, Camacho y Bordagaray en el medio fueron las modificaciones tácticas que ensayó el DT en busca de otra imagen del equipo. A ellos hay que sumarles los cambios de Ferrari por el suspendido Salazar y el recuperado Teo Gutiérrez por Herrera.
Pero la puesta en escena que hizo el entrenador no le dio los dividendos esperados más allá de que el resultado fue el que buscaba el equipo. Es que el equipo en el primer tiempo no tuvo volumen de juego y tuvo problemas en el retroceso, pese a que el rival no lo complicó demasiado, más allá de que tuvo un par de chances claras, como el mano a mano de Telechea y un cabezazo de Gagliardi -estaba solo- que fue a las manos de Sosa.
En ofensiva hubo más aportes individuales que juego colectivo. Solo el buen aporte de Camacho, que cada vez que apareció complicó y generó lo mejor del canalla, la movilidad permanente de Ruben, las trepadas de Ferrari por derecha y alguna aparición de Bordagaray. Pero el circuito nunca se completó, porque fue muy escaso el aporte de Teo y casi nulo el de Colman.
En el complemento, el Chacho debió dar un golpe de timón y volver a mandar a la cancha a Gio Lo Celso y el Chaqueño Montoya, en lugar de Colman y Bordagaray, y ahí encontró su mejor versión en este partido.
Porque Lo Celso aportó su desequilibrio habitual e hizo jugar un poco más al equipo, además de encontrar socios en Montoya -hasta que lo expulsaron-, Camacho y Ruben.
Lo que no pudo disimular del todo fueron las dudas en el retroceso, más allá de que el uruguayo Menosse pareció estar un escalón por encima de lo que mostró Torsiglieri hasta ahora. Pero sufrió en ese aspecto y volvió a otorgar algunas ventajas, que hoy tal vez no fueron más pronunciadas y quedaron más disimuladas porque el rival también era otro.
Pero es un punto en el que el cuerpo técnico y el plantel deberán seguir trabajando para recuperar ese aspecto de confiabilidad que daba el equipo en los torneos anteriores. Y aceitar un poco más el aspecto ofensivo, donde el equipo hoy por momentos tuvo más volumen de juego.