El servicio de Vasculares Cerebrales Agudos del Hospital José María Cullen, de la ciudad de Santa Fe, realizó una “compleja y novedosa intervención” a una mujer de 78 años, evitando que le quedaran secuelas luego de sufrir un accidente cerebrovascular isquémico agudo.
La cartera sanitaria precisó ayer que “se trató de una trombectomía mecánica, que al ser practicada de inmediato evitó que la paciente sufriera secuelas, como ocurre en los accidentes isquémicos”.
Alejandro Musacchio, jefe del servicio, explicó que “los accidentes cerebrovasculares (ACV) son la segunda causa de muerte, en promedio, en el mundo, y la primera de invalidez”, pero aclaró que “hay que diferenciar los ACV hemorrágicos de los ACV isquémicos (ACVi)”.
“Si bien ambos, de no ser diagnosticados y tratados a tiempo pueden ser mortales, el isquémico fundamentalmente es el que más secuelas deja en las personas que lo padecieron. Los ACVi son 80 por ciento más secuelantes, y requieren de atención inmediata”, completó.
Las secuelas pueden ir desde severos problemas para hablar, movilizarse, comprender o tener una vida autónoma y, a diferencia del ACV hemorrágico, el ACVi es más difícil de diagnosticar en la consulta de atención primaria o en una guardia general.
En cuanto a la paciente, Musacchio indicó que “fue tratada con éxito mediante trombectomía mecánica, una técnica avanzada que se utiliza para el tratamiento agudo de los pacientes con accidentes cerebrovasculares isquémicos”.
“El ACVi es una emergencia médica que se produce cuando una arteria cerebral se bloquea por la presencia de un coágulo; causando daño cerebral irreversible y, en algunos casos, la muerte. Es crucial que los pacientes sean tratados de manera rápida y efectiva para minimizar los riesgos y mejorar su recuperación”, agregó Musacchio.
Y explicó que “la trombectomía mecánica es una intervención que, mediante el cateterismo de los vasos cerebrales (se ingresa con pequeños catéteres a través de las arterias), se extraen en forma directa los coágulos que obstruyen el flujo sanguíneo cerebral”.
“La paciente ingresó con síntomas de un ACVi en fase aguda. Tras ser evaluada y diagnosticada en conjunto por nuestros especialistas se decidió realizar una trombectomía mecánica. La intervención fue un éxito y la paciente se encuentra en fase de recuperación”, completó Musacchio.