Con una gran fiesta, finalizó el viernes la edición 2025 de la Colonia de Vacaciones del Polideportivo Municipal de San Lorenzo, servicio gratuito e inclusivo del que participaron casi 1.500 niños de todos los barrios de la ciudad. Hubo atracciones especiales en la pileta y más tarde un show de espuma, muñecos cabezones y lluvia de agua con los Bomberos Voluntarios.
“Gracias a todo el equipo de trabajo. Esto es una gran responsabilidad; 1500 chicos pasaron por la Colonia. Gracias a los profes y guardavidas, a los papás por confiar en nosotros, a las vecinales, a Cree por estar acá, a todas las instituciones que se integraron para que esta fuera una colonia para todos y no sólo para algunos. Gracias por ayudarnos a que durante todo este tiempo los niños fueran felices”, expresó el intendente Leonardo Raimundo.
Lo acompañaron la secretaria de Gobierno y Cultura, Verónica Cittadini; el concejal Gustavo Oggero; la subsecretaria de Desarrollo Local, Producción, Empleo y Turismo, Delfina Cavagnero; y el subsecretario de Deportes, Roque Caballero.
Desde los barrios de San Lorenzo
Durante las primeras tres semanas (del 7 al 24 de enero entre las 8 y las 12) asistieron niños de los barrios Norte, Rivadavia, Las Quintas, Islas Malvinas, Moreno, Díaz Vélez, Oroño, El Pino, Alem, Escalada, Sargento Cabral, Villa Felisa, San Martín, 1º de Julio e integran la institución Anide.
En tanto que en las tres últimas (del 28 de enero al 14 de febrero entre las 8 y las 12) participaron los que viven en 3 de Febrero, Mitre, Fonavi, Bouchard, José Hernández, Del Combate, Capitán Bermúdez, Supe, 2 de Abril, Morando, San Eduardo, 17 de Agosto, San Martín, 1º de Julio y forman parte de Anide.
Los chicos fueron transportados desde las sedes barriales al Polideportivo y de regreso cuando culminó la jornada. Durante su estadía en el predio se les ofrecieron dos comidas, realizaron actividades lúdicas y deportivas y, bajo la supervisión de los guardavidas municipales, disfrutaron de la pileta del complejo. En total, fueron 50 los profesionales a cargo de su cuidado, entre profesores, docentes para chicos con discapacidad y guardavidas.
Además recibieron controles de salud y, de ser necesario, contaron con un servicio de acompañamiento que brindó un equipo interdisciplinario.