La franja de la costa central se está renovando y ya se proyecta un nuevo polo de gastronomía tanto sobre la línea del Paraná como por la avenida, en la continuidad desde Entre Ríos hasta Oroño. A partir del cambio de concesiones, la aparición de nuevas propuestas y la consolidación de las que ya estaban, la densidad de locales ha crecido y creen que será uno de los fuertes del verano en la ciudad.
Las ventajas naturales son evidentes: en modo verano, el sector, con río y fresco, está cerca y bien conectado. La oferta gastronómica se compone de parrillas, pizzerías, birrerías, heladerías y cafeterías. "Es un polo que se nutre de dos factores. El primero es una alta densidad ocupacional. Allí hay mucho edificio con un habitante de perfil socioeconómico que requiere servicio de gastronomía cercano", analizó el presidente de la Asociación Empresaria Hotelero Gastronómica de Rosario, Alejandro Pastore.
Por otra parte, destacó que "sobre todo en modo diurno, es un balcón al río de manera directa". En su visión, esto lo convierte "en un espacio muy acogedor para el habitante de Rosario o el visitante que se encuentra con una locación que le permite consumir con vista directa al Paraná, y también es una zona por la que mucha gente pasea caminando", detalló.
La concesión del bar Quillagua (Corrientes y el Río) quedó en manos del grupo ContePub, Mendiaz y Ridolfo. Los dueños de Negroni, Peñón del Águila y el desaparecido Johnny B. Good van a instalar una franquicia cordobesa, Pizzería Popular, una oferta familiar. Los bares Quita Pena y El Charladero (Corrientes y el río) seguirán bajo un grupo conformado por dos empresarios que venían gestionándolos (Blodorn y Nazor) más los que tenían Quillagua (Beretta y Bertotto).
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Ambos se adjudicaron por 6 años con la posibilidad de dos de prórroga y continuarán funcionando toda la temporada de verano hasta marzo del 2024. Luego comenzarán las obras del nuevo proyecto. El Charladero será reemplazado por el bar Kuara, que combinará diseño moderno con valorización de la histórica construcción ferroviaria. Su carta será amplia. Quita Pena será una estación verde que ofrecerá bebidas y comidas saludables al paso y contempla trabajar con granjas orgánicas de la zona con productos de estación.
Justo frente a ese triángulo, sobre Jujuy (que antes es avenida del Huerto y luego toma el nombre Wheelwright) se aglutinan las propuestas más jóvenes. Club Growler abrió hace unas semanas donde estaba Baf y tiene una terraza muy prominente con vista al parque España, y a pocos metros está la Pizzería de las Tortugas Ninja, que se instaló en 2020 y fue la segunda de las cinco sucursales de la marca.
Más adelante se encuentra el refugio Patagonia que abrió en 2021 en la Casa del Tango (vigente hasta 2026 más dos años de prórroga), y sobre la costa siguen los tradicionales clubes de pescadores con sus restaurantes (Bajada España, Club Mitre y El Dorado) y Los Jardines. Del otro lado, sobre la trama urbana, como oferta complementaria se ubican Basquiat Café, Sablé Paris, la parrilla Viejo Balcón, y las heladerías Malva y Marbet.
Sobre la misma línea (entre el río y Arturo Illia) está la concesión llamada Puerto España (España y el río), que incluye a la histórica parrilla Don Ferro, el salón de fiestas y Flora. Fue otorgada al mismo grupo que la explotaba (Ritagliatti-Gonzáles Sh) hasta el 2031, con dos años de prórroga. Ya finalizó el recambio de tejas en el edificio, la remodelación en el estacionamiento y espacio público, y siguen las obras en los baños públicos. Próximamente también comenzarán en la cocina del bar Flora.
En tanto, en Río Mío la concesión está vigente hasta 2026 más tres años de prórroga. El corredor imaginario se puede estirar hasta Oroño con Tea Connection (Oroño y Avenida López), en el inmueble que fue remodelado hace un año por la firma Green 83 SRL y la tiene por 6 años más dos de prórroga; y Davis, que se encuentra en la etapa final de las obras de remodelación (sector de terraza), que estarán listas para diciembre de este año. La explotación fue otorgada a Pro Linse SRL por 8 años más dos de prórroga.
Puntos a favor
La zona tiene un potencial enorme. En su momento, hace 20 años, supo tener mucho empuje con bares y restaurantes tradicionales, y después pasó por un momento de retracción frente a otros puntos que fueron más pujantes, como Pichincha, la renovación de Paseo Pellegrini, la zona norte o el surgimiento de Puerto Norte. Hoy despega de nuevo de la mano de una renovación de las propuestas.
"El atractivo te lo da ese paseo en la costa del Paraná. Naturalmente tenés una vista increíble del río y las islas, hay mucho parque. Es un paseo que los fines de semana tiene muchísima circulación de gente que sale a caminar, correr, lleva a sus hijos a los espacios verdes, especialmente con los primeros calores", analizó Maximiliano Giménez Vera, uno de los socios de la Pizzería de las Tortugas Ninja.
De ese modo, el espacio reúne características que predisponen a que la gente se relaje y tenga un momento para compartir. "Por eso es importante que entre los que estamos y los que van a desembarcar en las nuevas concesiones coordinemos acciones para recibir rosarinos y turistas. Mientras más propuestas vayan acercándose, probablemente todos los locales nos vamos a ver favorecidos. Están empezando a verse síntomas de una recuperación de la zona", explicó.
Pero si bien la zona tiene una alta circulación, eso no guarda una relación lineal con los que pueden sentarse a disfrutar en un local gastronómico. "Estamos atravesando un momento económico del país que hace que la gente recorte gastos de salidas o elija comprar y comer en casa para ahorrar. Es lo que está pasando con la clase media. En momentos como éste, el desafío es cómo seguir siendo atractivos para proponer momentos de esparcimiento y reunión de familias y amigos en nuestros negocios", apuntó el gastronómico.
Sin embargo, en un tinte más positivo, Giménez Vera dijo que "los emprendedores rosarinos le dejamos el trabajo de estabilizar la economía a los que tienen que ocuparse de eso, y seguimos tratando de ser creativos y peleando por espacios abiertos, recuperados por todos los ciudadanos, y también atractivos para turistas que vienen a conocer la ciudad, abriendo una carta de propuestas que sean lo más inclusivas posibles para todos los clientes".
En ese sentido, destacó: "No bajamos los brazos y seguimos generando, abrimos locales, buscamos captar la atención de las personas y les mostramos que su elección en cada consumo es muy importante. Por eso los premiamos e inventamos promociones, y les hacemos la posibilidad de elegirnos más fácil en estos momentos complicados socialmente. Creemos que son estos momentos que nos recargan las pilas a todos para seguir en la lucha del día a día", cerró.