Las intensas lluvias que se registraron durante la semana pasada obligaron a realizar un nuevo y riguroso monitoreo sobre las barrancas del río a partir de la situación atípica que se viene presentando en la costa rosarina por la pronunciada y abrupta bajante del Paraná, tanto durante el año pasado y en los últimos meses de este año, que ubican la altura del río en índices negativos.
Es por eso que día a día, el municipio realiza controles coordinados con Defensa Civil desde el lado de la barranca y Prefectura Naval en el caso del río para monitorear viejos pilotes que aún permanecen en pie y muelles de clubes de pesca y otras instituciones a fin de evitar situaciones de derrumbe que puedan generar contratiempos.
"Se hicieron algunos relevamientos desde el río hace algunas semanas y caminando desde la zona de barranca; seguramente en los próximos días se haga alguno nuevo. Por ahora no se detectó ningún episodio de gravedad, pero el fenómeno de la bajante obliga a realizar un monitoreo permanente", indicaron fuentes del municipio a La Capital.
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Defensa Civil monitorea desde una embarcación la zona de barrancas. (Foto: Defensa Civil)
En tal sentido, comentaron que "se estuvieron haciendo algunas recorridas junto a prefectura y por el momento no se reportaron casos de gravedad, pero como se sabe estos fenómenos muchas veces provocan situaciones difíciles de prevenir".
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Por su parte, desde Defensa Civil, el subdirector Gonzalo Ratner señaló: "Estamos haciendo un recorrido periódico de la costa y lo dividimos por sectores, tratando de identificar a pie la posibilidad de sectores que puedan significar algún peligro".
"Más allá de un pequeño hundimiento normal y lógico en el terreno por estas situaciones de la bajante, no hemos detectado ninguna posibilidad que indique derrumbe o desprendimiento de magnitud", completó.
Durante este lunes se hicieron recorridos en toda la zona de la costa central, en lo que involucra al Parque a la Bandera, Galpones de la franja del río y Parque de España, mientras que la semana pasada se realizaron tareas en la zona de los silos, Puerto Norte y desde el agua.
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Los recorridos del lado de la barranca se hacen de manera pedestre y son periódicos. (Foto: Defensa Civil)
Bajante histórica
A lo largo de la historia, el río ha experimentado altas y bajas respecto al caudal, pero las registradas durante el año pasado y este año son las más críticas en los últimos 50 años.
De llegar a mínimas de 23 centímetros durante los meses más secos del año pasado, durante las últimas semanas de este 2021 se registraron bajas que oscilan los -20 centímetros en el hidrómetro del Puerto de Rosario, teniendo en cuenta que la altura media del Paraná en la costa local es de 3,20 metros.
Teniendo como antecedente el derrumbe de la barranca del club Mitre de pesca, que gracias a las restricciones no generó heridos ni víctimas en el lugar, el municipio decidió reforzar los controles sobre la barranca para tener un monitoreo diario de la situación.
En aquella oportunidad no fue solo el club de pesca sino que también se habían registrado hundimientos en un sector de la caleta del Club Náutico Sportivo Avellaneda y el Paseo del Caminante, de ahí la rigurosidad de la Municipalidad en conjunto con Defensa Civil y Prefectura para tener un control pormenorizado de la situación.
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Defensa Civil monitorea desde una embarcación la zona de barrancas. (Foto: Defensa Civil)