El 8 de diciembre, día del tradicional armado del arbolito de Navidad, volvió a demostrar que sigue siendo una de las fechas más fuertes del calendario comercial. En el tradicional paseo de calle San Luis, los locales trabajaron con muy buen nivel de actividad y un movimiento que, según los comerciantes, superó ampliamente las proyecciones.
A pesar del feriado, la mayoría decidió abrir. Y no se equivocó. “La jornada fue totalmente positiva. La venta respondió muy bien y se vio un movimiento que superó las expectativas”, describieron desde el corredor.
El rubro más buscado fue, como cada año, el de la decoración navideña. “El ticket promedio fue de 20.000 pesos. La gente llevó la línea completa de armado y decorado del arbolito para sumar a uno que ya tenían”, explicaron.
La tendencia coincide con lo que se vio en temporadas anteriores: más que comprar un árbol nuevo, las familias optaron por renovar luces, guirnaldas y adornos para ajustarse al presupuesto sin dejar de lado la tradición.
>>Leer más: Diez ideas para armar un arbolito de Navidad económico: libros apilados, plantas de interior y hasta fotos
Las fichas del comercio puestas en las Fiestas
Durante toda la mañana y el mediodía, la circulación en el centro de Rosario fue constante. Hubo quienes aprovecharon para hacer compras familiares y quienes se acercaron a completar los últimos detalles antes de encender el arbolito por la noche. Los comerciantes destacaron que, incluso con un año complejo para el consumo, el Día del Arbolito sigue funcionando como un incentivo emocional y comercial.
En el corredor comercial esperan que el buen ritmo se mantenga hacia la segunda quincena de diciembre, cuando empieza el pico de demanda por las fiestas y se vuelven más fuertes las compras de regalos.
Cómo llegó a la Argentina el uso del arbolito
Fue recién en 1807 cuando en Argentina comenzaron a verse los primeros árboles de Navidad. La historia cuenta que un irlandés introdujo el hábito al decorar con un pico una plaza pública.
Más allá del sentido religioso, de festejo, de celebración del cambio, hay quienes le atribuyen al árbol de Navidad otros significados, como el universo, la prosperidad, la vida, la siembra y la cosecha. Los adornos de colores fueron reemplazando a las manzanas que recordaban el paraíso donde Adán y Eva cometieron el pecado original, según la Biblia.
>>Leer más: Diez ideas para armar un arbolito de Navidad económico
Hoy, no hay una estética única en el armado y orna mentación del pino. A las bolas de colores se les sumaron guirnaldas y luces, las que reemplazaron a las velas que simbolizaban la luz de Cristo y la unión de las familias. Esos sí, siempre coronando su punta, la estrella de Belén es innegociable.
El porqué de los regalos
Los presentes en el árbol también tienen su razón de ser. Se estima que en Belén, la gente ponía en el árbol algún objeto preciado a modo de obtener buenas compensaciones para el año entrante.
El 8 de diciembre de 1854, en su bula Ineffabilis Deus, Pío IX proclamó que María (madre de Dios) fue preservada –por un privilegio único- del pecado original desde el primer instante de su existencia. De ahí el armado del árbol el 8 de diciembre, Día de la Virgen Inmaculada Concepción.