Buenos Aires.- La Red Solidaria, que lidera Juan Carr, informó a la Justicia de
Tierra del Fuego que recibió el testimonio de una mujer que aseguró haber trabajado con un
matrimonio que tendría en su poder a la niña Sofría Herrera, y que se la llevó a Canadá.
Se trataría de un matrimonio argentino que se habría llevado a la chiquita, secuestrada en Río
Grande el 28 de setiembre pasado, primero a San Luis, luego a Chile y finalmente a Canadá, porque
en el vecino país no se habrían sentido seguros.
Según publicó hoy el diario La Nación, la Red Solidaria, que participa de la búsqueda de la
chiquita, presentó un escrito ante el juez Eduardo López, que investiga el caso.
Según la publicación, Carr señaló que a la madre de Sofía, María Elena Delgado, le llamó la
atención que la mujer diera precisiones sobre la intimidad de su hija que no habían trascendido en
los medios, como por ejemplo que la chiquita, aún con casi cuatro años, usara chupete.
De todas formas, aún se intentaba establecer la veracidad de los dichos de la mujer, en el marco
de una causa en la que ya varias personas presentaron pistas falsas.
Sofía desapareció el 28 de setiembre último, cuando fue con sus padres al camping John Goodall,
a unos 60 kilómetros de Río Grande, donde vive la familia.
Desde entonces los investigadores no han logrado hallar ningún dato cierto que oriente sobre su
paradero.
La mujer habría dicho que se decidió a hacer la denuncia presuntamente por temor a ser
considerada cómplice del secuestro.
Asimismo, habría dicho que vive en el noroeste del Gran Buenos Aires y que se comunicó con la
Red Solidaria para tranquilizar a la familia porque, dijo, la nena se encontraría bien.
Carr habría mantenido varias conversaciones con la mujer, en una de las cuales efectuó una
grabación del diálogo y lo presentó a la Justicia.
El diario señaló que en uno de los tramos de la grabación a los que tuvo acceso, la mujer decía
que “un matrimonio la llevó de Río Grande a San Luis y de allí fueron a Chile, pero como allá
no se sentían seguros, viajaron a Canadá”.
Además, la mujer afirmó que “la nena estuvo en mis manos”, ya que supuestamente
trabajaba con el matrimonio que la tenía en su poder.
“Tenía el flequillo, se lo llevaron para atrás y le pusieron una hebillita”, dijo la
mujer.(DyN)