Una mamá se detuvo con su automóvil en la zona de Recoleta para ayudar en Recoleta. Dejó a su hijo de siete años dormido dentro del vehículo pero a los tres minutos apareció la grúa para llevárselo. Ahora, podría ser denunciada por "abandono de persona".
El hecho ocurrió el martes pasado, cuando Miriam, su novio y su pequeño hijo conocieron casi de casualidad a un indigente discapacitado que pasa sus días en la esquina de Tagle y Pagano, en el barrio porteño de Recoleta. Al ver la precaria situación en la que vive, la mujer y el nene decidieron volver el día siguiente para llevarle comida, abrigo y algunos objetos que permitan hacerle su vida un poco más llevadera.
Poco antes de llegar, el niño se quedó dormido en el asiento de atrás del auto. La madre estacionó a mitad de cuadra y decidió dejarlo durmiendo porque tenía previsto demorarse pocos minutos con la persona a la que querían ayudar.
Sin embargo, esos breves segundos fueron suficientes para transformar una obra de bien en uno de los peores momentos de su vida. Mientras estaba con el indigente, una grúa del servicio de acarreo de la Ciudad de Buenos Aires se llevó el auto sin percatarse de que había un niño durmiendo en el interior del vehículo.
"Cuando estábamos por llegar mi nene, que tiene 7 años, se quedó dormido. Decido dejarlo en el auto para no despertarlo y bajo a dejar las cosas. Vuelvo en un segundo para retirar lo que había quedado en el auto, lo veo y después me quedo hablando con esta persona. Y cuando vuelvo, la grúa se había llevado el auto con mi hijo adentro. Me tardé dos o tres minutos nada más. Yo estaba a unos 40 o 50 metros, volví y no estaba el auto", relató Miriam a TN.
Testigos en el lugar le informaron que había sido la grúa y no había sido un robo. La mujer se desesperó pero alguien llegó para calmarla y prestarle dinero para ir hasta la playa de estacionamiento en la que depositan los autos acarreados por mal estacionamiento.
"Empecé a gritar. Todos salieron porque pensaron que me habían robado. Los que vieron todo me dijeron que la grúa se había llevado el auto. Mi cartera quedó adentro del auto. Alguien me dio plata para poder tomarme un taxi", contó la mujer sin sospechar que la cadena de frustraciones y enojos no iba a terminar solo con llegar al lugar en el que estaba su hijo.
"Llegué a los gritos, desaforada, diciendo que se habían llevado el auto sin mirar, con el nene adentro y se quedaron pasmados. Empezaron a buscar el auto porque al principio no lo encontraban. Más me angustiaba hasta que lo encontramos. Por suerte el nene seguía durmiendo. No se dio cuenta de nada. Es un milagro. Se despertó después de que lo abracé mientras chequeaba que no le haya pasado nada", agregó Miriam.
Llamó a su pareja para que la acompañara y ni los responsables de la grúa ni los oficiales en el lugar le ofrecieron disculpas ni le explicaron la situación. Ella pidió un comprobante que aclarara que se habían llevado el auto con el chico adentro.
"Vino mi novio, exigimos que nos dieran el comprobante. Llamamos a la policía y minutos después vino. Al principio me contuvieron y me dijeron que estaba mal lo que habían hecho. Después uno de los policías habla con el responsable de la grúa y vuelven con un discurso totalmente cambiado. Me dijeron que me iban a hacer una denuncia por abandono de persona. A mí, que estaba ayudando a una persona en situación de calle desde hace 10 años. Me puse a llorar. Pensé que iba a ir presa. Me quería ir", comentó la mujer.
Lo cierto es que además de la denuncia, le cobraron los 750 pesos del acarreo y la multa por mal estacionamiento. "Hice la denuncia en la comisaría pero posiblemente enfrente una denuncia por abandono de persona. Hice la denuncia porque se llevaron un auto sin mirar si había una persona porque lo único que quieren es hacer las cosas rápido y su objetivo es facturar", criticó.